Este pasado viernes 28 de marzo, se registró un terremoto de magnitud 7.7 en la escala de Ritcher en el país asiático de Birmania , el cual se sintió en el territorio de Tailandia y partes del sur de China. El epicentro se situó a 16 kilómetros de la ciudad de Sagaing, en Birmania, con una profundidad superficial de sólo 10 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). Posteriormente a los minutos, hubo una réplica de una magnitud de 6,7. De acuerdo a reportes de la DW, la cifra de fallecidos después del terremoto asciende a 1.644 personas en Birmania junto a 3.408 heridos, la mayoría en la ciudad de Mandalay y las zonas aledañas. Esta información vino de la mano de la junta militar gobernante este sábado. Por su parte en Tailandia, el terremoto que sacudió la zona metropolitana de Bangkok, dejó a 9 muertos y más de 100 desaparecidos, la mayoría bajo los escombros de un edificio, según datos del El Mundo. El influencer chileno Nicolás Pérez Salgado llegó a la ciudad tailandesa Bangkok y a las horas se vio enfrentado a este terremoto.. Él conversó con T13 para entregar detalles sobre su experiencia en este desastre natural. Sentí el movimiento del suelo, no lo asocié a un terremoto. Me di cuenta que era terremoto cuando ya vi que la gente estaba llegando en masa desde los edificios evacuando hacia el parque donde yo estaba. Les pregunté qué estaba pasando y me dijeron que había sido un terremoto fuerte, partió relatando. Al comparar este movimiento telúrico con uno que haya experimentado en el país s, él señaló que no lo sintió fuerte en comparación al ocurrido durante la madrugada del 27 febrero. Este terremoto Tailandia yo no lo sentí para nada fuerte,de hecho yo lo asocié más temblor como le decimos Chile,a un movimiento sísmico menor intensidad.Pero,yo creo parte debe estar suelo,o sea,en parque.Si hubiese estado edificio tal vez sentido más fuerte.Con respecto daños pudo haber presenciado,yo vi ningún daño,nicaída escombros,nifracturas edificios.Nisiquiera estas eh aguas piscinas edificios caían cascadas tampoco.Solamente presencié masas gente evacuando desde edificios,yposterior caos generóa sismo tema está dando servicio trenes,cerró.PUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDAD Fuente: Publimetro
En Chile, temas de salud mental lideran licencias médicas por lo que el desafío de los empleadores es implementar programas de bienestarque apoyen a trabajadores agotados, estresados o con la sensación de que sus vacaciones no son suficientes. El mundo está inmerso en una “metacrisis”, fenómeno que se da cuando un conjunto de crisis interconectadas como la sensación de inseguridad, el aumento del costo de la vida, los conflictos geopolíticos y la aceleración tecnológica, convergen impactando tanto a la salud mental como al bienestar global. No cabe duda de que estamos en medio de un “tsunami” que expertos acuñan con el término “recesión emocional”. Recesión emocional e incertidumbre Según el reporte “State of the Heart 2024”, de Six Seconds, -el estudio más grande que mide la inteligencia emocional en organizaciones de 160 países-, hemos entrado en una “recesión emocional”, caracterizada por presentar altos niveles de agotamiento y bajo nivel de bienestar, el que alcanzó un mínimo histórico, descendiendo un 5.3% en los últimos cuatro años. Esta “metacrisis” también deja consecuencias en Chile: informes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, dan cuenta que en nuestro país aumentaron emociones negativas implosivas –que conducen al retraimiento individual– como la preocupación y el miedo, el que se quintuplicó. Así mismo, disminuyó la esperanza y se posicionó la incertidumbre como la emoción predominante en el país. En nuestros lugares de trabajo, la recesión emocional se manifiesta en mayores niveles de agotamiento, menor compromiso e insatisfacción laboral. “Observamos que esta crisis ocurre por la dificultad que están teniendo las organizaciones para comprender y gestionar los cambios en las dinámicas laborales y por no adaptarse rápido a éstos. Muchas de ellas, aún ven las competencias esenciales (conocidas como competencias “blandas”) como accesorias o de bajo valor, ignorando que dichas habilidades, como la inteligencia emocional, son claves para conseguir resultados y sostenerlos en el tiempo. En Chile, existe un choque fuerte entre la presión hacia la productividad y la falta de espacios necesarios para el bienestar. Vincular a la salud mental y su relación con la eficiencia sigue siendo un desafío, pero es esencial abordarlo con una mirada técnica y profesional. La falta de atención a la insatisfacción de las personas genera malestar, falta de compromiso y menor productividad”, afirma Shenyin Loo Valdés, psicólogo organizacional, coach y director de desarrollo de personas de MétodoConsultores. Al igual que en una recesión económica, una recesión emocional puede salirse de control si no se atiende, con importantes consecuencias no sólo para las personas, sino también para las organizaciones. El estrés crónico en el trabajo genera síntomas físicos y psicológicos que podrían derivar en un “burnout” o “síndrome de desgaste profesional”, el que está recientemente incorporado en la clasificación internacional de enfermedades por la Organización Mundial de la Salud y que según el último reporte de laborum.com, en Chile afecta al 89% de los trabajadores. Salud mental de los trabajadores chilenos La salud mental, entendida de manera amplia como bienestar emocional o psicosocial, se ha constituido en una de las principales preocupaciones de las personas en Chile y para las autoridades en uno de los mayores desafíos. En 2024 el ministerio de salud lanzó la campaña “Es tiempo de priorizar la salud mental en los lugares de trabajo”. El efecto de esta y otras iniciativas en los entornos laborales es de vital trascendencia, ya que, la principal causa de licencias médicas en nuestro país son los trastornos mentales con un 32%, lo que generó que en 2023 el 61,4% del gasto por subsidio por incapacidad laboral se concentrara en estos diagnósticos. “El agotamiento es un fenómeno multifactorial, pero en Chile destaca una dinámica laboral exigente y estilos de liderazgo que requieren aprender a integrar la eficiencia y el bienestar en el trabajo. A pesar de instaurar las 40 horas, seguimos priorizando la productividad y el sobreesfuerzo sobre el trabajo inteligente, con un ritmo acelerado, desordenado y con resultados deficientes. Los liderazgos son claves para gestionar el estrés, pero a menudo lo amplifican. Además, muchos trabajadores carecen de habilidades para manejar el agotamiento, organizar tareas, poner límites o regularse emocionalmente, lo que se amplifica en organizaciones que no consideran a las personas y equipos en la proyección de crecimiento”, añade el psicólogo laboral Shenyin Loo Valdés. Protocolo de vigilancia de riesgos psicosociales en el trabajo del Minsal. En Chile, la forma de evaluar los agentes de riesgo que pueden generar esta sintomatología es el Protocolo de Vigilancia de Riesgos Psicosociales que, si bien es de aplicación obligatoria en todos los lugares de trabajo de más de 10 trabajadores desde 2013, ha tenido una lenta puesta en marcha. El cuestionario de Evaluación Ambiental Laboral – Salud Mental CEAL-SM no solo busca medir para evaluar el estrés en el trabajo, sino también tiene una labor preventiva sobre este riesgo. “Hay informes de la Asociación Chilena y la Mutual de Seguridad que dan cuenta que hoy la mayor parte de las enfermedades de salud mental en Chile son por liderazgos disfuncionales; encabezados por líderes autocráticos o muy permisivos que propician entornos laborales tóxicos o perjudiciales para el crecimiento de los equipos o que tienen conductas hostiles. Si bien la Ley Karin viene a regular esta situación, debemos recordar que el principal enfoque de esta ley es preventivo, por lo que debemos capacitar a las jefaturas para que lideren esta transformación centrados en las personas y sus relaciones laborales. Hoy tenemos estilos de liderazgo que están sólo evaluando los resultados, mirando las tareas y objetivos, más que las dinámicas de las personas y los equipos de trabajo, y esto ocurre porque esas jefaturas no cuentan con las habilidades necesarias para manejar esta nueva realidad altamente compleja”, señala el experto en psicología laboral. ¿Qué pueden hacer las organizaciones? De a poco las organizaciones están cambiando la mirada respecto al bienestar laboral, los datos apuntan a que: “un trabajo saludable es clave para prevenir el estrés, depresión y ansiedad y que estas enfermedades impactan directamente en la productividad de las personas”. Un estudio científico publicado en la revista Molecular Psychiatry afirma que, si se minimizara el estrés laboral, podrían reducirse un 18 por ciento los casos de trastornos depresivos. “Las organizaciones necesitan metodologías concretas y personalizadas para abordar el bienestar de forma integral, identificando las dimensiones que afectan la salud mental en el trabajo. El cuestionario CEAL-SM es útil para el diagnóstico, pero luego hay que generar programas que apunten a cambiar dinámicas en los equipos de trabajo. Acciones aisladas como, por ejemplo, las charlas no bastan sin un enfoque que detecte y aborde las variables que generan malestar y, de esta forma, generar planes de acción eficaces y monitoreables en el tiempo”, finaliza Shenyin Loo Valdés.
Ignacio Castillo, un chileno de 22 años, fue arrestado en Houston, Texas, luego de un presunto robo en una zona residencial en el que utilizó un dispositivo de interferencia de radiofrecuencia para bloquear las comunicaciones de la policía. Según reportó Fox News, la detención ocurrió el 8 de febrero, cuando los oficiales respondieron a un aviso de robo y experimentaron fallos en sus radios, cámaras corporales y en el sistema de cierre de sus patrullas. La causa de la interferencia se descubrió poco después : en la mochila de Castillo se encontraba un “jammer”, un bloqueador de señales capaz de impedir la transmisión de radiofrecuencia entre dispositivos electrónicos, según consignó 24 horas. El joven, quien llevaba pocos meses viviendo en EE.UU. y se alojaba en un hotel, intentó evadir a los oficiales, pero fue detenido en el lugar y permanece bajo custodia mientras se desarrolla la investigación. El uso de este tipo de tecnología en actividades delictivas ha generado preocupación entre las autoridades locales. Juan Guevara Torres, experto en tecnología, explicó a Fox 26 de Houston que estos dispositivos funcionan enviando señales de alta intensidad que interfieren en las comunicaciones. “Bloquea las señales que van del punto A al punto B”, detalló, según recogió La Cuarta. Por su parte, Kim Ogg, exfiscal del condado de Harris, advirtió sobre la gravedad del caso. “El hecho de que este acusado haya sido capaz de interferir con los oficiales de policía locales, bloqueando sus llaveros de radios, entrando a sus autos y cámaras corporales, lo convierte en una situación peligrosa para las fuerzas del orden”, declaró a Fox 26. Actualmente, Castillo enfrenta cargos por robo a residencia e interferencia con frecuencias de radio gubernamentales, delitos que podrían acarrear penas severas en la justicia estadounidense. Fuente: Publimetro
Este pasado viernes 28 de marzo, se registró un terremoto de magnitud 7.7 en la escala de Ritcher en el país asiático de Birmania , el cual se sintió en el territorio de Tailandia y partes del sur de China. El epicentro se situó a 16 kilómetros de la ciudad de Sagaing, en Birmania, con una profundidad superficial de sólo 10 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). Posteriormente a los minutos, hubo una réplica de una magnitud de 6,7. De acuerdo a reportes de la DW, la cifra de fallecidos después del terremoto asciende a 1.644 personas en Birmania junto a 3.408 heridos, la mayoría en la ciudad de Mandalay y las zonas aledañas. Esta información vino de la mano de la junta militar gobernante este sábado. Por su parte en Tailandia, el terremoto que sacudió la zona metropolitana de Bangkok, dejó a 9 muertos y más de 100 desaparecidos, la mayoría bajo los escombros de un edificio, según datos del El Mundo. El influencer chileno Nicolás Pérez Salgado llegó a la ciudad tailandesa Bangkok y a las horas se vio enfrentado a este terremoto.. Él conversó con T13 para entregar detalles sobre su experiencia en este desastre natural. Sentí el movimiento del suelo, no lo asocié a un terremoto. Me di cuenta que era terremoto cuando ya vi que la gente estaba llegando en masa desde los edificios evacuando hacia el parque donde yo estaba. Les pregunté qué estaba pasando y me dijeron que había sido un terremoto fuerte, partió relatando. Al comparar este movimiento telúrico con uno que haya experimentado en el país s, él señaló que no lo sintió fuerte en comparación al ocurrido durante la madrugada del 27 febrero. Este terremoto Tailandia yo no lo sentí para nada fuerte,de hecho yo lo asocié más temblor como le decimos Chile,a un movimiento sísmico menor intensidad.Pero,yo creo parte debe estar suelo,o sea,en parque.Si hubiese estado edificio tal vez sentido más fuerte.Con respecto daños pudo haber presenciado,yo vi ningún daño,nicaída escombros,nifracturas edificios.Nisiquiera estas eh aguas piscinas edificios caían cascadas tampoco.Solamente presencié masas gente evacuando desde edificios,yposterior caos generóa sismo tema está dando servicio trenes,cerró.PUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDADPUBLICIDAD Fuente: Publimetro
En Chile, temas de salud mental lideran licencias médicas por lo que el desafío de los empleadores es implementar programas de bienestarque apoyen a trabajadores agotados, estresados o con la sensación de que sus vacaciones no son suficientes. El mundo está inmerso en una “metacrisis”, fenómeno que se da cuando un conjunto de crisis interconectadas como la sensación de inseguridad, el aumento del costo de la vida, los conflictos geopolíticos y la aceleración tecnológica, convergen impactando tanto a la salud mental como al bienestar global. No cabe duda de que estamos en medio de un “tsunami” que expertos acuñan con el término “recesión emocional”. Recesión emocional e incertidumbre Según el reporte “State of the Heart 2024”, de Six Seconds, -el estudio más grande que mide la inteligencia emocional en organizaciones de 160 países-, hemos entrado en una “recesión emocional”, caracterizada por presentar altos niveles de agotamiento y bajo nivel de bienestar, el que alcanzó un mínimo histórico, descendiendo un 5.3% en los últimos cuatro años. Esta “metacrisis” también deja consecuencias en Chile: informes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, dan cuenta que en nuestro país aumentaron emociones negativas implosivas –que conducen al retraimiento individual– como la preocupación y el miedo, el que se quintuplicó. Así mismo, disminuyó la esperanza y se posicionó la incertidumbre como la emoción predominante en el país. En nuestros lugares de trabajo, la recesión emocional se manifiesta en mayores niveles de agotamiento, menor compromiso e insatisfacción laboral. “Observamos que esta crisis ocurre por la dificultad que están teniendo las organizaciones para comprender y gestionar los cambios en las dinámicas laborales y por no adaptarse rápido a éstos. Muchas de ellas, aún ven las competencias esenciales (conocidas como competencias “blandas”) como accesorias o de bajo valor, ignorando que dichas habilidades, como la inteligencia emocional, son claves para conseguir resultados y sostenerlos en el tiempo. En Chile, existe un choque fuerte entre la presión hacia la productividad y la falta de espacios necesarios para el bienestar. Vincular a la salud mental y su relación con la eficiencia sigue siendo un desafío, pero es esencial abordarlo con una mirada técnica y profesional. La falta de atención a la insatisfacción de las personas genera malestar, falta de compromiso y menor productividad”, afirma Shenyin Loo Valdés, psicólogo organizacional, coach y director de desarrollo de personas de MétodoConsultores. Al igual que en una recesión económica, una recesión emocional puede salirse de control si no se atiende, con importantes consecuencias no sólo para las personas, sino también para las organizaciones. El estrés crónico en el trabajo genera síntomas físicos y psicológicos que podrían derivar en un “burnout” o “síndrome de desgaste profesional”, el que está recientemente incorporado en la clasificación internacional de enfermedades por la Organización Mundial de la Salud y que según el último reporte de laborum.com, en Chile afecta al 89% de los trabajadores. Salud mental de los trabajadores chilenos La salud mental, entendida de manera amplia como bienestar emocional o psicosocial, se ha constituido en una de las principales preocupaciones de las personas en Chile y para las autoridades en uno de los mayores desafíos. En 2024 el ministerio de salud lanzó la campaña “Es tiempo de priorizar la salud mental en los lugares de trabajo”. El efecto de esta y otras iniciativas en los entornos laborales es de vital trascendencia, ya que, la principal causa de licencias médicas en nuestro país son los trastornos mentales con un 32%, lo que generó que en 2023 el 61,4% del gasto por subsidio por incapacidad laboral se concentrara en estos diagnósticos. “El agotamiento es un fenómeno multifactorial, pero en Chile destaca una dinámica laboral exigente y estilos de liderazgo que requieren aprender a integrar la eficiencia y el bienestar en el trabajo. A pesar de instaurar las 40 horas, seguimos priorizando la productividad y el sobreesfuerzo sobre el trabajo inteligente, con un ritmo acelerado, desordenado y con resultados deficientes. Los liderazgos son claves para gestionar el estrés, pero a menudo lo amplifican. Además, muchos trabajadores carecen de habilidades para manejar el agotamiento, organizar tareas, poner límites o regularse emocionalmente, lo que se amplifica en organizaciones que no consideran a las personas y equipos en la proyección de crecimiento”, añade el psicólogo laboral Shenyin Loo Valdés. Protocolo de vigilancia de riesgos psicosociales en el trabajo del Minsal. En Chile, la forma de evaluar los agentes de riesgo que pueden generar esta sintomatología es el Protocolo de Vigilancia de Riesgos Psicosociales que, si bien es de aplicación obligatoria en todos los lugares de trabajo de más de 10 trabajadores desde 2013, ha tenido una lenta puesta en marcha. El cuestionario de Evaluación Ambiental Laboral – Salud Mental CEAL-SM no solo busca medir para evaluar el estrés en el trabajo, sino también tiene una labor preventiva sobre este riesgo. “Hay informes de la Asociación Chilena y la Mutual de Seguridad que dan cuenta que hoy la mayor parte de las enfermedades de salud mental en Chile son por liderazgos disfuncionales; encabezados por líderes autocráticos o muy permisivos que propician entornos laborales tóxicos o perjudiciales para el crecimiento de los equipos o que tienen conductas hostiles. Si bien la Ley Karin viene a regular esta situación, debemos recordar que el principal enfoque de esta ley es preventivo, por lo que debemos capacitar a las jefaturas para que lideren esta transformación centrados en las personas y sus relaciones laborales. Hoy tenemos estilos de liderazgo que están sólo evaluando los resultados, mirando las tareas y objetivos, más que las dinámicas de las personas y los equipos de trabajo, y esto ocurre porque esas jefaturas no cuentan con las habilidades necesarias para manejar esta nueva realidad altamente compleja”, señala el experto en psicología laboral. ¿Qué pueden hacer las organizaciones? De a poco las organizaciones están cambiando la mirada respecto al bienestar laboral, los datos apuntan a que: “un trabajo saludable es clave para prevenir el estrés, depresión y ansiedad y que estas enfermedades impactan directamente en la productividad de las personas”. Un estudio científico publicado en la revista Molecular Psychiatry afirma que, si se minimizara el estrés laboral, podrían reducirse un 18 por ciento los casos de trastornos depresivos. “Las organizaciones necesitan metodologías concretas y personalizadas para abordar el bienestar de forma integral, identificando las dimensiones que afectan la salud mental en el trabajo. El cuestionario CEAL-SM es útil para el diagnóstico, pero luego hay que generar programas que apunten a cambiar dinámicas en los equipos de trabajo. Acciones aisladas como, por ejemplo, las charlas no bastan sin un enfoque que detecte y aborde las variables que generan malestar y, de esta forma, generar planes de acción eficaces y monitoreables en el tiempo”, finaliza Shenyin Loo Valdés.
Ignacio Castillo, un chileno de 22 años, fue arrestado en Houston, Texas, luego de un presunto robo en una zona residencial en el que utilizó un dispositivo de interferencia de radiofrecuencia para bloquear las comunicaciones de la policía. Según reportó Fox News, la detención ocurrió el 8 de febrero, cuando los oficiales respondieron a un aviso de robo y experimentaron fallos en sus radios, cámaras corporales y en el sistema de cierre de sus patrullas. La causa de la interferencia se descubrió poco después : en la mochila de Castillo se encontraba un “jammer”, un bloqueador de señales capaz de impedir la transmisión de radiofrecuencia entre dispositivos electrónicos, según consignó 24 horas. El joven, quien llevaba pocos meses viviendo en EE.UU. y se alojaba en un hotel, intentó evadir a los oficiales, pero fue detenido en el lugar y permanece bajo custodia mientras se desarrolla la investigación. El uso de este tipo de tecnología en actividades delictivas ha generado preocupación entre las autoridades locales. Juan Guevara Torres, experto en tecnología, explicó a Fox 26 de Houston que estos dispositivos funcionan enviando señales de alta intensidad que interfieren en las comunicaciones. “Bloquea las señales que van del punto A al punto B”, detalló, según recogió La Cuarta. Por su parte, Kim Ogg, exfiscal del condado de Harris, advirtió sobre la gravedad del caso. “El hecho de que este acusado haya sido capaz de interferir con los oficiales de policía locales, bloqueando sus llaveros de radios, entrando a sus autos y cámaras corporales, lo convierte en una situación peligrosa para las fuerzas del orden”, declaró a Fox 26. Actualmente, Castillo enfrenta cargos por robo a residencia e interferencia con frecuencias de radio gubernamentales, delitos que podrían acarrear penas severas en la justicia estadounidense. Fuente: Publimetro