El presidente estadounidense Donald Trump tuvo este lunes su esperada celebración del acuerdo de paz para Gaza entre Israel y Hamás, en una ceremonia en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, donde proclamó que “ por fin tenemos paz en Oriente Medio ”. La jornada, organizada por Estados Unidos y Egipto, reunió a más de veinte líderes internacionales, aunque estuvo marcada por el protagonismo absoluto del mandatario norteamericano. Una cumbre con invitados de alto nivel El presidente egipcio Abdelfatah al Sisi fue el anfitrión de la cita, considerada “ histórica ” por varios asistentes. Entre los líderes presentes se encontraban Pedro Sánchez (España), Emmanuel Macron (Francia), Keir Starmer (Reino Unido) y Giorgia Meloni (Italia). Sharm el Sheij se engalanó con vallas publicitarias en las que un sonriente Trump daba la bienvenida a los mandatarios con el lema “Welcome to the land of peace”. Firma del acuerdo tras dos años de guerra El acuerdo fue suscrito por Trump, Al Sisi, el presidente de Turquía Recep Tayyip Erdogan, y el emir de Catar Tamim bin Hamad Al Thani, quienes actuaron como mediadores desde los ataques de Hamás contra Israel en octubre de 2023. “Fue un gran obstáculo, pero todo salió tan bien que nadie podía creerlo. Nunca antes había visto tanta felicidad”, dijo Trump, al levantar el documento con su firma. El presidente estadounidense calificó el pacto como “ el acuerdo más grande y complejo del siglo ” y aseguró que “ la Tercera Guerra Mundial no comenzará en Oriente Medio ”. Estados Unidos, garante del proceso Ni Israel ni Hamás estuvieron presentes en la ceremonia, aunque ambos fueron invitados oficialmente. El Gobierno israelí, encabezado por Benjamín Netanyahu, rechazó a última hora su participación. Egipto, en un comunicado final, señaló que Estados Unidos será una “garantía esencial” para la paz en Gaza y destacó que “ el proceso de paz requiere figuras excepcionales capaces de emprender e implementar iniciativas valientes, como el presidente Trump ”. Al Sisi, por su parte, invitó a Trump a asistir a la Conferencia de Reconstrucción de Gaza, prevista para noviembre en El Cairo.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció el domingo que la guerra en Gaza ha llegado a su fin, mientras se dirigía a Israel y Egipto para celebrar un acuerdo de cese al fuego y liberación de rehenes. La guerra ha terminado ¿De acuerdo? ¿Lo entienden?, expresó Trump a los periodistas cuando le consultaron sobre la finalización del conflicto entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás. Trump destacó que este momento es muy especial antes de abordar el Air Force One en la Base Conjunta Andrews. Todos están muy emocionados por este momento, añadió el mandatario sobre el acuerdo que pone fin a la guerra en Gaza. El presidente de Estados Unidos tiene previsto realizar una visita de horas a Israel el lunes y luego copresidirá junto con su homólogo egipcio, Abdel Fatah al Sisi, la cumbre internacional por la paz en Gaza en Sharm el Sheij, Egipto. El acuerdo de tregua entre Israel y Hamás, que entró en vigor el viernes, incluye un intercambio de los últimos rehenes israelíes en Gaza -20 vivos y 28 fallecidos- por cerca de 2.000 palestinos detenidos en prisiones israelíes, incluidos 250 presos por motivos de seguridad nacional. Un alto mando militar israelí anónimo informó a la prensa que no se espera que todos los cuerpos de los rehenes fallecidos sean devueltos el lunes. Es algo que desafortunadamente anticipamos, que no todos los rehenes muertos sean entregados mañana, declaró la fuente. Fuente: Meganoticias
El presidente Gabriel Boric se reunió con el papa León XIV en el Vaticano para discutir la situación en Gaza. Al finalizar la reunión, Boric expresó a la prensa su deseo de poner fin a la masacre en la región. En sus declaraciones, Boric destacó la importancia de que los pueblos que han sufrido puedan convivir en paz, enfatizando en la necesidad de actuar con humildad y respeto. Según Boric, el papa León XIV compartió esta visión, señalando la importancia de que todos los liderazgos actúen con humildad y respeto hacia quienes han sufrido. Al ser consultado sobre el papel de Donald Trump en el acuerdo entre Israel y Hamás, Boric afirmó que cualquier persona que contribuya a la paz es bienvenida. Aunque reconoció que no considera que Trump represente los valores de humildad y respeto, valoró cualquier colaboración para detener la masacre en Gaza. Enfatizando en la importancia de poner fin al sufrimiento de las personas afectadas por el conflicto, Boric destacó la esperanza que representa cualquier ayuda en esa causa. Su mensaje final fue claro: bienvenidos sean todos quienes ayuden en esa causa. De todas formas, el mandatario dijo creer que los liderazgos siempre tienen que ser humildes, respetar a sus adversarios y creo que el presidente Trump no representa eso. Fuente: CNN Chile País
El espectáculo de medio tiempo del Super Bowl, uno de los eventos más esperados del año, se ha convertido en el centro de la controversia política y cultural en Estados Unidos. PUBLICIDAD En esta ocasión, las críticas no provienen de los fanáticos del deporte ni de los seguidores de la música, sino del propio presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, quien ha cuestionado abiertamente la elección del puertorriqueño Bad Bunny como protagonista del espectáculo de 2026. Durante una reciente entrevista, Johnson calificó la decisión de la NFL como “una terrible elección”, argumentando que el intérprete de reguetón no representa los valores adecuados para un evento con tanta visibilidad global. El político republicano expresó su preocupación por el impacto del show en los espectadores más jóvenes, describiéndolos como “una audiencia impresionable que merece un mejor ejemplo”. Además, Johnson sugirió al veterano cantante de country Lee Greenwood como una alternativa más “adecuada” para el espectáculo. Greenwood, reconocido por su tema patriótico “God Bless the U.S.A.”, es considerado un himno no oficial del conservadurismo estadounidense. El intérprete ha participado en eventos vinculados al Partido Republicano y en múltiples mítines del presidente Donald Trump, con quien comparte una larga relación política y musical. Estas declaraciones evidencian las profundas divisiones ideológicas presentes en la cultura estadounidense. PUBLICIDAD Mientras algunos sectores conservadores respaldan a Johnson y aplauden su defensa de los “valores tradicionales”, otros ven sus comentarios como un intento de censurar la diversidad cultural que artistas como Bad Bunny representan. El cantante puertorriqueño se ha convertido en un símbolo de la globalización de la música latina y de una nueva generación que desafía las etiquetas tradicionales. Su presencia en el escenario más visto del mundo del entretenimiento representa la influencia del idioma español y la cultura urbana en un país históricamente dominado por el pop y el rock anglosajón. A pesar de la controversia, tanto la NFL como la productora del espectáculo han confirmado que Bad Bunny seguirá siendo el protagonista. Con su estilo provocador y su impacto global, Bad Bunny no solo llevará su música al Super Bowl, sino que también desafiará los límites del discurso cultural en la nación más mediática del planeta. Fuente: Publimetro Deportes
El Mundial masculino de Fútbol 2026, que aún no comienza hasta dentro de ocho meses, ya se ve envuelto en controversias relacionadas con el gobierno de Donald Trump. El presidente denegó visas a la delegación iraní para el sorteo y amenaza con quitar la sede a ciudades no seguras, que curiosamente son administradas por el Partido Demócrata. La FIFA trató de reafirmar su autoridad en la toma de decisiones sobre el evento, pero sorprendentemente no lo hizo a través de su presidente Gianni Infantino, quien ha estado cortejando a Trump desde hace meses y ha visitado la Casa Blanca en varias ocasiones durante el mandato del presidente republicano. La polémica surgió cuando Trump mencionó la posibilidad de retirar ciudades del calendario de partidos si no cumplen con sus estándares de seguridad, refiriéndose a ciudades administradas por demócratas críticas de sus políticas migratorias y de orden público. “Si creo que no es seguro, lo moveremos”, expresó Trump al ser consultado sobre el Mundial, que contará con 48 selecciones y 104 partidos en total. El vicepresidente de la FIFA, Victor Montagliani, afirmó: “Es el torneo de la FIFA, la jurisdicción de la FIFA, la FIFA toma esas decisiones”. Montagliani enfatizó que el fútbol no puede subordinarse a intereses políticos o coyunturas gubernamentales. Afirmó que el deporte trasciende cualquier mandato político y declaró: “El fútbol es más grande que ellos y sobrevivirá a su régimen, a su gobierno y a sus eslóganes”. A pesar de esto, Infantino no ha respondido a las amenazas de Trump ni a la decisión del gobierno estadounidense de negar visas a la delegación iraní. La FIFA confirmó en 2022 las ciudades anfitrionas del torneo, incluyendo estadios cerca de Nueva York, Los Ángeles y San Francisco. Estados Unidos albergará partidos en once ciudades, mientras que México y Canadá contribuirán con tres y dos sedes respectivamente. Cada ciudad firmó acuerdos contractuales con la FIFA para garantizar la logística y organización del evento. Cualquier modificación tan cerca del inicio supondría desafíos legales y operativos significativos. Fuente: Publimetro Deportes
El presidente estadounidense Donald Trump tuvo este lunes su esperada celebración del acuerdo de paz para Gaza entre Israel y Hamás, en una ceremonia en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, donde proclamó que “ por fin tenemos paz en Oriente Medio ”. La jornada, organizada por Estados Unidos y Egipto, reunió a más de veinte líderes internacionales, aunque estuvo marcada por el protagonismo absoluto del mandatario norteamericano. Una cumbre con invitados de alto nivel El presidente egipcio Abdelfatah al Sisi fue el anfitrión de la cita, considerada “ histórica ” por varios asistentes. Entre los líderes presentes se encontraban Pedro Sánchez (España), Emmanuel Macron (Francia), Keir Starmer (Reino Unido) y Giorgia Meloni (Italia). Sharm el Sheij se engalanó con vallas publicitarias en las que un sonriente Trump daba la bienvenida a los mandatarios con el lema “Welcome to the land of peace”. Firma del acuerdo tras dos años de guerra El acuerdo fue suscrito por Trump, Al Sisi, el presidente de Turquía Recep Tayyip Erdogan, y el emir de Catar Tamim bin Hamad Al Thani, quienes actuaron como mediadores desde los ataques de Hamás contra Israel en octubre de 2023. “Fue un gran obstáculo, pero todo salió tan bien que nadie podía creerlo. Nunca antes había visto tanta felicidad”, dijo Trump, al levantar el documento con su firma. El presidente estadounidense calificó el pacto como “ el acuerdo más grande y complejo del siglo ” y aseguró que “ la Tercera Guerra Mundial no comenzará en Oriente Medio ”. Estados Unidos, garante del proceso Ni Israel ni Hamás estuvieron presentes en la ceremonia, aunque ambos fueron invitados oficialmente. El Gobierno israelí, encabezado por Benjamín Netanyahu, rechazó a última hora su participación. Egipto, en un comunicado final, señaló que Estados Unidos será una “garantía esencial” para la paz en Gaza y destacó que “ el proceso de paz requiere figuras excepcionales capaces de emprender e implementar iniciativas valientes, como el presidente Trump ”. Al Sisi, por su parte, invitó a Trump a asistir a la Conferencia de Reconstrucción de Gaza, prevista para noviembre en El Cairo.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció el domingo que la guerra en Gaza ha llegado a su fin, mientras se dirigía a Israel y Egipto para celebrar un acuerdo de cese al fuego y liberación de rehenes. La guerra ha terminado ¿De acuerdo? ¿Lo entienden?, expresó Trump a los periodistas cuando le consultaron sobre la finalización del conflicto entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás. Trump destacó que este momento es muy especial antes de abordar el Air Force One en la Base Conjunta Andrews. Todos están muy emocionados por este momento, añadió el mandatario sobre el acuerdo que pone fin a la guerra en Gaza. El presidente de Estados Unidos tiene previsto realizar una visita de horas a Israel el lunes y luego copresidirá junto con su homólogo egipcio, Abdel Fatah al Sisi, la cumbre internacional por la paz en Gaza en Sharm el Sheij, Egipto. El acuerdo de tregua entre Israel y Hamás, que entró en vigor el viernes, incluye un intercambio de los últimos rehenes israelíes en Gaza -20 vivos y 28 fallecidos- por cerca de 2.000 palestinos detenidos en prisiones israelíes, incluidos 250 presos por motivos de seguridad nacional. Un alto mando militar israelí anónimo informó a la prensa que no se espera que todos los cuerpos de los rehenes fallecidos sean devueltos el lunes. Es algo que desafortunadamente anticipamos, que no todos los rehenes muertos sean entregados mañana, declaró la fuente. Fuente: Meganoticias
El presidente Gabriel Boric se reunió con el papa León XIV en el Vaticano para discutir la situación en Gaza. Al finalizar la reunión, Boric expresó a la prensa su deseo de poner fin a la masacre en la región. En sus declaraciones, Boric destacó la importancia de que los pueblos que han sufrido puedan convivir en paz, enfatizando en la necesidad de actuar con humildad y respeto. Según Boric, el papa León XIV compartió esta visión, señalando la importancia de que todos los liderazgos actúen con humildad y respeto hacia quienes han sufrido. Al ser consultado sobre el papel de Donald Trump en el acuerdo entre Israel y Hamás, Boric afirmó que cualquier persona que contribuya a la paz es bienvenida. Aunque reconoció que no considera que Trump represente los valores de humildad y respeto, valoró cualquier colaboración para detener la masacre en Gaza. Enfatizando en la importancia de poner fin al sufrimiento de las personas afectadas por el conflicto, Boric destacó la esperanza que representa cualquier ayuda en esa causa. Su mensaje final fue claro: bienvenidos sean todos quienes ayuden en esa causa. De todas formas, el mandatario dijo creer que los liderazgos siempre tienen que ser humildes, respetar a sus adversarios y creo que el presidente Trump no representa eso. Fuente: CNN Chile País
El espectáculo de medio tiempo del Super Bowl, uno de los eventos más esperados del año, se ha convertido en el centro de la controversia política y cultural en Estados Unidos. PUBLICIDAD En esta ocasión, las críticas no provienen de los fanáticos del deporte ni de los seguidores de la música, sino del propio presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, quien ha cuestionado abiertamente la elección del puertorriqueño Bad Bunny como protagonista del espectáculo de 2026. Durante una reciente entrevista, Johnson calificó la decisión de la NFL como “una terrible elección”, argumentando que el intérprete de reguetón no representa los valores adecuados para un evento con tanta visibilidad global. El político republicano expresó su preocupación por el impacto del show en los espectadores más jóvenes, describiéndolos como “una audiencia impresionable que merece un mejor ejemplo”. Además, Johnson sugirió al veterano cantante de country Lee Greenwood como una alternativa más “adecuada” para el espectáculo. Greenwood, reconocido por su tema patriótico “God Bless the U.S.A.”, es considerado un himno no oficial del conservadurismo estadounidense. El intérprete ha participado en eventos vinculados al Partido Republicano y en múltiples mítines del presidente Donald Trump, con quien comparte una larga relación política y musical. Estas declaraciones evidencian las profundas divisiones ideológicas presentes en la cultura estadounidense. PUBLICIDAD Mientras algunos sectores conservadores respaldan a Johnson y aplauden su defensa de los “valores tradicionales”, otros ven sus comentarios como un intento de censurar la diversidad cultural que artistas como Bad Bunny representan. El cantante puertorriqueño se ha convertido en un símbolo de la globalización de la música latina y de una nueva generación que desafía las etiquetas tradicionales. Su presencia en el escenario más visto del mundo del entretenimiento representa la influencia del idioma español y la cultura urbana en un país históricamente dominado por el pop y el rock anglosajón. A pesar de la controversia, tanto la NFL como la productora del espectáculo han confirmado que Bad Bunny seguirá siendo el protagonista. Con su estilo provocador y su impacto global, Bad Bunny no solo llevará su música al Super Bowl, sino que también desafiará los límites del discurso cultural en la nación más mediática del planeta. Fuente: Publimetro Deportes
El Mundial masculino de Fútbol 2026, que aún no comienza hasta dentro de ocho meses, ya se ve envuelto en controversias relacionadas con el gobierno de Donald Trump. El presidente denegó visas a la delegación iraní para el sorteo y amenaza con quitar la sede a ciudades no seguras, que curiosamente son administradas por el Partido Demócrata. La FIFA trató de reafirmar su autoridad en la toma de decisiones sobre el evento, pero sorprendentemente no lo hizo a través de su presidente Gianni Infantino, quien ha estado cortejando a Trump desde hace meses y ha visitado la Casa Blanca en varias ocasiones durante el mandato del presidente republicano. La polémica surgió cuando Trump mencionó la posibilidad de retirar ciudades del calendario de partidos si no cumplen con sus estándares de seguridad, refiriéndose a ciudades administradas por demócratas críticas de sus políticas migratorias y de orden público. “Si creo que no es seguro, lo moveremos”, expresó Trump al ser consultado sobre el Mundial, que contará con 48 selecciones y 104 partidos en total. El vicepresidente de la FIFA, Victor Montagliani, afirmó: “Es el torneo de la FIFA, la jurisdicción de la FIFA, la FIFA toma esas decisiones”. Montagliani enfatizó que el fútbol no puede subordinarse a intereses políticos o coyunturas gubernamentales. Afirmó que el deporte trasciende cualquier mandato político y declaró: “El fútbol es más grande que ellos y sobrevivirá a su régimen, a su gobierno y a sus eslóganes”. A pesar de esto, Infantino no ha respondido a las amenazas de Trump ni a la decisión del gobierno estadounidense de negar visas a la delegación iraní. La FIFA confirmó en 2022 las ciudades anfitrionas del torneo, incluyendo estadios cerca de Nueva York, Los Ángeles y San Francisco. Estados Unidos albergará partidos en once ciudades, mientras que México y Canadá contribuirán con tres y dos sedes respectivamente. Cada ciudad firmó acuerdos contractuales con la FIFA para garantizar la logística y organización del evento. Cualquier modificación tan cerca del inicio supondría desafíos legales y operativos significativos. Fuente: Publimetro Deportes