Bajo tal contexto, surge el hotwifing, quizá, una forma moderna de voyeurismo, el acto de espiar que produce excitación, una versión consensuada que está en auge en las redes sociales y diversos portales. ¿Adiós a la monotonía? La mecánica del hotwifing consiste en que un hombre heterosexual y casado anima a su esposa a tener un encuentro sexual con otra persona, mientras él observa, un matrimonio abierto, en donde se aprueba “una infidelidad consentida” con el propósito de “avivar la llama de la pasión”. En terminos coloquiales, es como prestarle el auto o la bicicleta al amigo o compadre. Se trata de una práctica sexual que cada día tiene más adeptos, donde una mujer casada o en pareja estable tiene sexo con otros hombres, siendo informada y, algunas veces, consentida e incluso animada emocional o físicamente por su marido o pareja. A diferencia de otras dinámicas abiertas, aquí el énfasis suele estar en la excitación compartida y en el “empoderamiento sexual” de la mujer dentro de un marco de “respeto y comunicación”, en lo que confiere al hombre, tiende a ser activo y partícipe, ya sea observando, grabando o apoyando emocionalmente a su pareja. Aunque para muchos es polémico, quienes lo practican aseguran que les da libertad, seguridad y mucho deseo renovado e incluso la salvación de un matrimonio monótono. No obstante, los detractores de tal ejercicio, enfatizan que el erotismo, el sexo y el amor son cosas completamente distintas, y tal praxis no es ni lo uno ni lo otro, sino un acto descarado de pornografía disfrazado de “apertura amorosa”. No confundir En estos ámbitos de la sexualidad hay una línea muy delgada para definir tal o cual, y con el hotwifing (esposa caliente) no es la excepción ya que a menudo se le confunde con el cuckolding (cornudo). El primero se enfoca en el empoderamiento sexual de la esposa, muchas veces sin humillación o sumisión del esposo; el segundo, suele incluir elementos de sumisión o fetichismo de humillación hacia el marido. Por ello, cualquiera que sean las filias o atracciones sexuales, lo más conveniente es comunicarlo y encontrar la disposición en la contraparte, para disfrute placentero de los involucradas(os).
El comienzo de un nuevo año suele estar asociado con nuevas oportunidades. Muchos consideran que enero, el primer del mes, es el momento adecuado para comenzar a trabajar por cumplir sus propósitos, pero para otros es el tiempo para reflexionar sobre su matrimonio y ponerle punto final. En el ámbito legal, enero es conocido como el 'mes del divorcio', ya que las parejas suele examinar las opciones de separación y aumentan las solicitudes de divorcio. Específicamente, el primer lunes del Año Nuevo se conoce desde hace tiempo entre los abogados y consejeros como el 'día del divorcio'. Existen diversos estudios y estadísticas que han comprobado este fenómeno. Según la 'BCC', en Gales (Reino Unido), un bufete de abogados afirmó que las consultas en enero incrementaron un 150 por ciento con respecto a la media de noviembre, diciembre y febrero. Similarmente, un informe de 2016 de la Universidad de Washington examinó datos sobre solicitudes de divorcio a lo largo de 14 años. Entre 2001 y 2015, los investigadores observaron un aumento constante de los procedimientos de divorcio a partir de enero. De acuerdo con los investigadores, este patrón podría estar influenciado por las fiestas de fin de año. Muchos creen que hacerlo durante las celebraciones navideñas, que son vistas como momentos de alegría para compartir en familia, puede ser inapropiado. Además, según la firma de abogados Farrell Family Lawyers, muchas parejas no suelen compartir las 24 horas del día, excepto durante la temporada de Navidad. En estas festividades, aquellos que ya tienen problemas en su relación deben pasar más tiempo juntos y asistir a múltiples eventos que podrían aumentar sus dificultades. Enero también es el momento que muchos destinan para evaluar, reflexionar sobre la vida y pensar en lo que quieren cumplir durante el nuevo año. Para algunos, puede ser el divorcio. ¿Cómo lidiar con un divorcio en enero? El psicólogo Mark Travers compartió en la revista 'Forbes' los mejores consejos para lidiar con un divorcio en enero, pues este mes suele venir con muchas expectativas y otros factores que podrían sumar al estrés de una separación. A continuación, el listado completo: Permítase sentir sus emociones. Priorice el bienestar de sus hijos, si tiene. Evite hacer cambios drásticos en su vida durante el divorcio.
Diciembre, conocido por ser el mes de las festividades navideñas y las reuniones familiares, se ha consolidado como el momento preferido para las propuestas de matrimonio. Según estadísticas recientes, más del 40% de los compromisos ocurren entre noviembre y febrero, con diciembre liderando el ranking. Fechas icónicas como Nochebuena, Navidad y Año Nuevo se destacan como los días más populares para este momento tan especial. El ambiente festivo, las luces brillantes y la magia de las celebraciones crean el escenario perfecto para momentos románticos. Muchas parejas aprovechan la ocasión para compartir la noticia en presencia de sus seres queridos, haciendo de este un evento memorable y lleno de emociones. Además, el cierre del año, con su simbolismo de nuevos comienzos, inspira a muchos a dar el siguiente paso en sus relaciones. Los joyeros también confirman esta tendencia, reportando que diciembre es uno de los meses de mayor venta de anillos de compromiso. “Las fechas clave como el 24, 25 y 31 de diciembre concentran una gran cantidad de propuestas. La emoción del momento y la compañía de la familia hacen que estas fechas sean incomparables”, comentó un representante del sector. Así, mientras las luces navideñas iluminan las calles y los hogares, también iluminan nuevas promesas de amor eterno, convirtiendo diciembre en el mes más mágico para los compromisos.
Bajo tal contexto, surge el hotwifing, quizá, una forma moderna de voyeurismo, el acto de espiar que produce excitación, una versión consensuada que está en auge en las redes sociales y diversos portales. ¿Adiós a la monotonía? La mecánica del hotwifing consiste en que un hombre heterosexual y casado anima a su esposa a tener un encuentro sexual con otra persona, mientras él observa, un matrimonio abierto, en donde se aprueba “una infidelidad consentida” con el propósito de “avivar la llama de la pasión”. En terminos coloquiales, es como prestarle el auto o la bicicleta al amigo o compadre. Se trata de una práctica sexual que cada día tiene más adeptos, donde una mujer casada o en pareja estable tiene sexo con otros hombres, siendo informada y, algunas veces, consentida e incluso animada emocional o físicamente por su marido o pareja. A diferencia de otras dinámicas abiertas, aquí el énfasis suele estar en la excitación compartida y en el “empoderamiento sexual” de la mujer dentro de un marco de “respeto y comunicación”, en lo que confiere al hombre, tiende a ser activo y partícipe, ya sea observando, grabando o apoyando emocionalmente a su pareja. Aunque para muchos es polémico, quienes lo practican aseguran que les da libertad, seguridad y mucho deseo renovado e incluso la salvación de un matrimonio monótono. No obstante, los detractores de tal ejercicio, enfatizan que el erotismo, el sexo y el amor son cosas completamente distintas, y tal praxis no es ni lo uno ni lo otro, sino un acto descarado de pornografía disfrazado de “apertura amorosa”. No confundir En estos ámbitos de la sexualidad hay una línea muy delgada para definir tal o cual, y con el hotwifing (esposa caliente) no es la excepción ya que a menudo se le confunde con el cuckolding (cornudo). El primero se enfoca en el empoderamiento sexual de la esposa, muchas veces sin humillación o sumisión del esposo; el segundo, suele incluir elementos de sumisión o fetichismo de humillación hacia el marido. Por ello, cualquiera que sean las filias o atracciones sexuales, lo más conveniente es comunicarlo y encontrar la disposición en la contraparte, para disfrute placentero de los involucradas(os).
El comienzo de un nuevo año suele estar asociado con nuevas oportunidades. Muchos consideran que enero, el primer del mes, es el momento adecuado para comenzar a trabajar por cumplir sus propósitos, pero para otros es el tiempo para reflexionar sobre su matrimonio y ponerle punto final. En el ámbito legal, enero es conocido como el 'mes del divorcio', ya que las parejas suele examinar las opciones de separación y aumentan las solicitudes de divorcio. Específicamente, el primer lunes del Año Nuevo se conoce desde hace tiempo entre los abogados y consejeros como el 'día del divorcio'. Existen diversos estudios y estadísticas que han comprobado este fenómeno. Según la 'BCC', en Gales (Reino Unido), un bufete de abogados afirmó que las consultas en enero incrementaron un 150 por ciento con respecto a la media de noviembre, diciembre y febrero. Similarmente, un informe de 2016 de la Universidad de Washington examinó datos sobre solicitudes de divorcio a lo largo de 14 años. Entre 2001 y 2015, los investigadores observaron un aumento constante de los procedimientos de divorcio a partir de enero. De acuerdo con los investigadores, este patrón podría estar influenciado por las fiestas de fin de año. Muchos creen que hacerlo durante las celebraciones navideñas, que son vistas como momentos de alegría para compartir en familia, puede ser inapropiado. Además, según la firma de abogados Farrell Family Lawyers, muchas parejas no suelen compartir las 24 horas del día, excepto durante la temporada de Navidad. En estas festividades, aquellos que ya tienen problemas en su relación deben pasar más tiempo juntos y asistir a múltiples eventos que podrían aumentar sus dificultades. Enero también es el momento que muchos destinan para evaluar, reflexionar sobre la vida y pensar en lo que quieren cumplir durante el nuevo año. Para algunos, puede ser el divorcio. ¿Cómo lidiar con un divorcio en enero? El psicólogo Mark Travers compartió en la revista 'Forbes' los mejores consejos para lidiar con un divorcio en enero, pues este mes suele venir con muchas expectativas y otros factores que podrían sumar al estrés de una separación. A continuación, el listado completo: Permítase sentir sus emociones. Priorice el bienestar de sus hijos, si tiene. Evite hacer cambios drásticos en su vida durante el divorcio.
Diciembre, conocido por ser el mes de las festividades navideñas y las reuniones familiares, se ha consolidado como el momento preferido para las propuestas de matrimonio. Según estadísticas recientes, más del 40% de los compromisos ocurren entre noviembre y febrero, con diciembre liderando el ranking. Fechas icónicas como Nochebuena, Navidad y Año Nuevo se destacan como los días más populares para este momento tan especial. El ambiente festivo, las luces brillantes y la magia de las celebraciones crean el escenario perfecto para momentos románticos. Muchas parejas aprovechan la ocasión para compartir la noticia en presencia de sus seres queridos, haciendo de este un evento memorable y lleno de emociones. Además, el cierre del año, con su simbolismo de nuevos comienzos, inspira a muchos a dar el siguiente paso en sus relaciones. Los joyeros también confirman esta tendencia, reportando que diciembre es uno de los meses de mayor venta de anillos de compromiso. “Las fechas clave como el 24, 25 y 31 de diciembre concentran una gran cantidad de propuestas. La emoción del momento y la compañía de la familia hacen que estas fechas sean incomparables”, comentó un representante del sector. Así, mientras las luces navideñas iluminan las calles y los hogares, también iluminan nuevas promesas de amor eterno, convirtiendo diciembre en el mes más mágico para los compromisos.