El restaurante La Familia de Calama, situado en la calle Ramírez #1917, ha sido clausurado temporalmente por la Seremi de Salud después de una inspección que reveló graves infracciones a las normas de higiene. Esta medida, que implica la suspensión de actividades y el inicio de un sumario sanitario, se ha tomado con el objetivo de salvaguardar la salud de los clientes ante un evidente problema de insalubridad. De acuerdo con el seremi de Salud, Alberto Godoy, la inspección se llevó a cabo como parte de un programa regular de fiscalización y puso al descubierto una serie de irregularidades preocupantes. Entre las más alarmantes se encontraban la presencia de cucarachas vivas y muertas, así como una acumulación significativa de grasa en fogones, campanas extractoras, paredes y techos. Pero las deficiencias no terminaban ahí. El informe emitido por la autoridad sanitaria detalló que el establecimiento tenía un lavamanos fuera de servicio y sin jabón, un extintor vencido desde 2022 y equipos de refrigeración en mal estado. Además, se descubrió que algunas materias primas se almacenaban a temperatura ambiente y otros productos se conservaban entre 12 y 18 grados Celsius, muy por encima del límite permitido de 5 grados, lo que representa un riesgo directo para la salud en términos de intoxicación alimentaria. Finalmente, el seremi Godoy afirmó que el restaurante no podrá reanudar sus operaciones hasta que haya corregido cada una de las deficiencias identificadas durante la inspección. En caso contrario, el local podría enfrentarse a multas que podrían ascender hasta las 1.000 UTM, según lo establecido en el Código Sanitario. Fuente: Antofagasta TV Regional
El restaurante La Familia de Calama, situado en la calle Ramírez #1917, ha sido clausurado temporalmente por la Seremi de Salud después de una inspección que reveló graves infracciones a las normas de higiene. Esta medida, que implica la suspensión de actividades y el inicio de un sumario sanitario, se ha tomado con el objetivo de salvaguardar la salud de los clientes ante un evidente problema de insalubridad. De acuerdo con el seremi de Salud, Alberto Godoy, la inspección se llevó a cabo como parte de un programa regular de fiscalización y puso al descubierto una serie de irregularidades preocupantes. Entre las más alarmantes se encontraban la presencia de cucarachas vivas y muertas, así como una acumulación significativa de grasa en fogones, campanas extractoras, paredes y techos. Pero las deficiencias no terminaban ahí. El informe emitido por la autoridad sanitaria detalló que el establecimiento tenía un lavamanos fuera de servicio y sin jabón, un extintor vencido desde 2022 y equipos de refrigeración en mal estado. Además, se descubrió que algunas materias primas se almacenaban a temperatura ambiente y otros productos se conservaban entre 12 y 18 grados Celsius, muy por encima del límite permitido de 5 grados, lo que representa un riesgo directo para la salud en términos de intoxicación alimentaria. Finalmente, el seremi Godoy afirmó que el restaurante no podrá reanudar sus operaciones hasta que haya corregido cada una de las deficiencias identificadas durante la inspección. En caso contrario, el local podría enfrentarse a multas que podrían ascender hasta las 1.000 UTM, según lo establecido en el Código Sanitario. Fuente: Antofagasta TV Regional