Los videojuegos son una forma de divertirse, para otros una verdadera pasión y también están los que los conciben como una forma de trabajar y generar ingresos. Cada 29 de agosto se celebra el “Día Internacional del Gamer”, instancia ideal para conocer los hábitos de quienes juegan en línea. PUBLICIDAD De esos hábitos trató la séptima “Radiografía Digital de Niños, Niñas y Adolescentes”, que este año aportó reveladores datos respecto del comportamiento que los menores del país tienen al momento de usar diferentes plataformas (dispositivos móviles o PC) para jugar en línea. El comportamiento de los gamers chilenos Elaborada por Criteria y ClaroVTR, este sondeo reveló que un 38% de los menores juega todos los días, en tanto que un 30% reconoce hacerlo casi todos los días. El estudio consigna también que los juegos de construcción de mundos son los preferidos (31%), en especial en el segmento entre los 8 y 12 años (40%). Del mismo modo, el teléfono móvil es el dispositivo más utilizado para jugar en línea (69%) y quienes más usan computadores son los adolescentes (53%). En tanto, los más pequeños son, en proporción, quienes más utilizan las tablets (23%). Los hallazgos son datos valiosos que nos permiten entender cómo y a qué juegan, lo que es fundamental para promover prácticas responsables y seguras en el uso de la tecnología — Cyntia Soto Respecto de esos hallazgos, Cyntia Soto, gerenta de Sostenibilidad de ClaroVTR, apuntó que “los datos aportados por nuestra Radiografía Digital de Niños, Niñas y Adolescentes nos permiten conocer los hábitos de juego online de los menores de edad en Chile”. “Los hallazgos son datos valiosos que nos permiten entender cómo y a qué juegan, lo que es fundamental para promover prácticas responsables y seguras en el uso de la tecnología”, agregó. PUBLICIDAD “Este estudio es un paso importante para comprender el impacto de los videojuegos en la vida de los menores y para desarrollar estrategias efectivas que promuevan su bienestar y seguridad en el mundo digital”, puntualizó. Cabe señalar que este estudio comprendió una muestra de mil menores entre niños, niñas y adolescentes, además de otro millar de padres y madres de las principales ciudades de las zonas norte, centro y sur de Chile.
Los niños pequeños, cuando notan que un ser querido está sintiendo tristeza o necesita ayuda, orgánicamente acuden a sostener, acompañar y calmarlo. En términos simples, están siendo solidarios. Y es que poder cuidar, proteger, confiar y pertenecer, son experiencias fundamentales en el desarrollo humano, así como sentirse cuidado, protegido, querido y parte de un grupo social. La solidaridad viene a resaltar justamente esa capacidad que tenemos para ocupar nuestra sensibilidad, fomentando la consciencia humana y movilizándonos hacia la empatía, la ocupación y la ayuda social. En este sentido, la “ educación socio emocional, es fundamental en el desarrollo integral de los estudiantes de todas las edades, intencionado su aplicación en la práctica y cotidianidad ”, explica Adela Gajardo, psicóloga del equipo de Salvaguarda de la red educacional Cognita, que cuenta con 17 colegios en Chile. “Podemos contribuir con una perspectiva que los ayude a identificar y fortalecer las competencias y habilidades que son esenciales para trabajar el valor de la solidaridad. Estas son la autogestión, la conciencia social, las habilidades sociales y resolución de conflictos, la empatía, la colaboración, el aprecio por la diversidad, la interdependencia y la pertenencia”, complementa la especialista. Modelo y ejemplo Sin embargo, por mucho que se trate de inculcar, el ejemplo es fundamental para la educación de cualquier valor, siendo las personas significativas de su entorno a quienes los niños siguen y que los inspiran a ser solidarios. “ En la familia, son los padres, abuelos y tíos; y en el colegio, sus profesores, principalmente ”, comenta la psicóloga de Cognita. Por eso es tan importante comprender que los adultos son un modelo permanente de la solidaridad, donde pueden además intencionar una actitud activa y propositiva al momento de participar y asistir a quienes lo necesiten. “ Los padres pueden ayudar a desarrollar la conciencia social en los niños, que les permitirá sensibilizar, empatizar y aportar desde su lugar, a quienes no presentan las mismas oportunidades ”, dice Adela Gajardo. Así, es principal que los niños reflexionen, aprecien y valoren las actitudes solidarias observadas en su casa y que tengan conciencia de cómo pueden ellos y ellas ayudar a fortalecerlas y hacerlas crecer. Para ello, la psicóloga propone trabajar con ejemplos y casos tomados de diversos ámbitos de la cotidianeidad como la actualidad, ciencia, artes, deporte, etc. donde ellos reconozcan la presencia o ausencia del valor de la solidaridad o conductas prosociales. Un ejercicio puede ser comentar a los niños que, a raíz de los cortes de luz por el temporal, hubo personas que no fueron afectadas en el suministro de electricidad e invitaron a quienes lo necesitaron para que pudieran cargar sus celulares o facilitaron un cable que les permitiera usar su refrigerador y algunas ampolletas. Asimismo, otra actividad formativa para realizar en familia se da en la película El Rey León, cuenta Adela Gajardo, psicóloga de la red Cognita. “ Cuando Scar enfrenta a Simba; ¿qué podría hacerse para que Scar fuera solidario? ¿Por qué él es así? ¿Podríamos comprenderlo y ayudarlo para que cambiara?” Sin duda una excelente invitación a reflexionar.
La creciente integración de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial (IA) en juguetes destinados al público infantil ha abierto un nuevo frente de preocupaciones para padres y guardianes en cuanto a la seguridad y la privacidad de los menores. Un estudio reciente realizado por Rapid7, una entidad de ciberseguridad, ha puesto de relieve una inquietante realidad, que debe ser de interés de muchos padres de familia: aproximadamente el 80% de los juguetes equipados con inteligencia artificial presentan vulnerabilidades significativas en términos de ciberseguridad. Además, enfatizó que estos juguetes también podrían ser explotados para fines de vigilancia no autorizada por parte de sujetos extraños. Qué peligros presentan estos juguetes con IA Este análisis, que ha abarcado una variada gama de dispositivos de Internet de las Cosas (IoT), incluidos juguetes con IA, muestra que el 90% de los artículos evaluados contienen al menos una falencia de seguridad crítica. El riesgo inherente a estas vulnerabilidades se traduce en la posibilidad de que actores malintencionados puedan acceder a datos sensibles almacenados en los juguetes, o peor aún, tomar control sobre sus funcionalidades de audio y video. Asimismo, un informe complementario proveniente de Consumer Reports ha venido a confirmar estos hallazgos, señalando que el 78% de los juguetes inteligentes analizados poseen puntos débiles que podrían facilitar la exposición de información personal de los niños. Por eso, es necesario estar atento a cualquier amenaza o comportamiento extraño y reconocer cómo proteger a los menores de estas amenazas cibernéticas. Qué dicen los padres sobre este hecho Intrínsecamente vinculado a estas evaluaciones, una encuesta realizada por NortonLifeLock refleja la creciente preocupación entre los padres. El 45% de los encuestados expresó su inquietud sobre el uso indebido potencial de las cámaras y micrófonos integrados en los juguetes inteligentes, los cuales podrían ser empleados para actividades de vigilancia encubierta. Ante este panorama, expertos en ciberseguridad recalcan la importancia de adoptar medidas preventivas para asegurar el uso seguro de estos juguetes, sin renunciar a sus beneficios en términos educativos y de entretenimiento. Cómo prevenir los riesgos de los juguetes que usan IA Para ello, se han compilado una serie de recomendaciones dirigidas a los padres, con el fin de fortalecer la protección de los menores frente a estos riesgos digitales. Entre las principales medidas sugeridas por expertos se encuentran: La realización de investigaciones previas antes de adquirir cualquier juguete inteligente, prestando especial atención a las reseñas sobre su seguridad y privacidad. Es crucial mantener actualizado el software de estos dispositivos, debido a que los fabricantes suelen lanzar parches y actualizaciones para corregir vulnerabilidades conocidas. La configuración de contraseñas robustas y únicas para cada juguete, que impidan conexiones de redes desconocidas y posibles ciberamenazas. La desactivación de funciones no esenciales, como cámaras y micrófonos cuando no estén en uso. Además, se insta a los padres a educar a sus hijos sobre los principios básicos de la seguridad en línea, fomentando un ambiente de diálogo abierto sobre los riesgos potenciales asociados a la tecnología. Estas estrategias, junto con una vigilancia constante de los padres en cuanto a las interacciones de los menores con sus juguetes inteligentes, podrían significar la diferencia entre asegurar una experiencia enriquecedora y segura y exponer a los niños a riesgos cibernéticos innecesarios. Por esto, en un mundo cada vez más conectado, donde la tecnología avanza a pasos sin precedentes, resulta imperativo que la seguridad digital de los más jóvenes se coloque en el centro de la conversación sobre innovación. Solo así será posible garantizar que la adopción de herramientas inteligentes contribuya positivamente al desarrollo y bienestar de los niños, sin comprometer su seguridad o privacidad.
Según reveló un estudio auspiciado por el Instituto Nacional de Abuso de Drogas en los Estados Unidos, el maltrato infantil no solo afecta de manera psicológica sino que físicamente modifica la estructura cortical del cerebro, aumentando la posibilidad de consumo de drogas y de padecer trastornos mentales en la edad adulta. Publicada por el Centro Nacional de Información Biotecnológica, la investigación de referencia realizó resonancias magnéticas a 265 niños (142 de ellos maltratados y 123 no maltratados), observándose marcadas diferencias en la centralidad de diversas regiones corticales. Martin Teicher y su equipo del McLean Hospital, Harvard Medical School y Northeastern University, asociaron el maltrato en los ahora adultos jóvenes con una menor centralidad en las regiones del cerebro involucradas en la regulación emocional y la capacidad de atribuir con precisión pensamientos o intenciones a los demás. Por el contrario, se encontró mayor centralidad en regiones que tienen que ver con la percepción emocional interna, el pensamiento autorreferencial y la autoconciencia. “ Esto puede proporcionar un mecanismo potencial de cómo el maltrato aumenta el riesgo para la psicopatología ”, establecieron los investigadores. A raíz de estos hallazgos, se determinó que el maltrato infantil es un factor altamente estresante que altera las trayectorias del desarrollo cerebral.
Chile tiene una lamentable realidad en términos de seguridad vial; diariamente fallece un promedio de 4 personas. Y en lo que va del año, ya han muerto más de 480 en siniestros viales, según la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset). Un panorama que nos invita a reflexionar sobre lo indispensable que es educar en seguridad vial desde edades tempranas, si queremos reducir estas cifras. Para Carla Cerda, coordinadora del programa Road Safety, el cual se realiza hace más de 10 años en los colegios Pumahue y Manquecura, de la red Cognita. “ Los niños, niñas y adolescentes deben ser educados para ser peatones y futuros conductores conscientes de su comportamiento y del impacto que éste puede conllevar en las calles y en la seguridad colectiva”. El objetivo central de este programa es reducir, a través de la adquisición de conocimientos y habilidades preventivas, los siniestros viales que involucran a los niños y jóvenes que transitan las calles del país. Para lograrlo, la especialista advierte que no sólo los colegios deben hacer esfuerzos, los padres también tienen que estar plenamente involucrados, educando desde el ejemplo y la construcción de hábitos. En ese sentido, transmitir los valores de la educación vial es esencial. Estos se focalizan en el autocuidado y el cuidado de los otros, ayudando a desarrollar hábitos de convivencia ciudadana, respeto por las normativas de tránsito, cuidado de la vida humana y natural, e impulsando prácticas que benefician a toda la comunidad. Carla Cerda comenta que en la red Cognita, pionera en instaurar este programa en sus colegios desde el jardín infantil, “se aborda la educación vial de manera transversal en todos los ciclos, de acuerdo a la edad, a través de intervenciones y recursos que acercan la temática de manera lúdica y significativa, como cuentos virtuales, cuenta cuentos, cuadernillos de trabajo, obras de teatro, convenios con instituciones que brindan charlas educativas, participación en la Brigada Road Safety, salidas educativas, jornadas prácticas en circuitos viales, entre otras”. Claves para inculcar hábitos La educación vial es una disciplina que busca preparar a las personas, idealmente desde la infancia, a cómo usar las vías públicas en el ejercicio de sus distintos roles sociales: como pasajero, peatón o conductor. La última semana de mayo se celebra la Semana de la Seguridad Vial, una instancia impulsada por la ONU a nivel mundial y que hace tres años lanzó la Década de Acción por la Seguridad Vial 2021-2030, para promover medidas y acciones de prevención de siniestros de tránsito, una sólida cultura vial, además del fortalecimiento de la buena convivencia en los espacios públicos. La especialista de la red Cognita entrega algunas sencillas recomendaciones para inculcar la seguridad vial en los niños: Ejemplo, ejemplo, ejemplo. Los niños hacen y dicen lo que ven y escuchan de sus padres, así que ten una conducta amable, a la defensiva y de precaución. Utiliza el cinturón de seguridad y enfatiza la importancia de su uso en todo momento, ya sea como conductor, copiloto o pasajero en cualquier vehículo. Lo mismo con el sistema de retención infantil. No cruces a media calle. Recuérdales a tus hijos que se debe cruzar sólo en pasos de cebra o semáforos. Y que aún así, se debe mirar y tener precaución antes de cruzar. En las luces rojas, aprovecha de explicarles lo que significan las señales de tránsito que hay en el entorno y por qué es importante recordarlas y respetarlas. No hables por teléfono, mandes mensajes, ni estés preocupado de la radio. Tu hijo debe verte concentrado en la ruta. Enséñales a subir y bajar por la puerta del auto que da hacia la acera, a no sacar la cabeza, los brazos o juguetes por la ventana. Tampoco a jugar con los pestillos o cerraduras del auto.
Los videojuegos son una forma de divertirse, para otros una verdadera pasión y también están los que los conciben como una forma de trabajar y generar ingresos. Cada 29 de agosto se celebra el “Día Internacional del Gamer”, instancia ideal para conocer los hábitos de quienes juegan en línea. PUBLICIDAD De esos hábitos trató la séptima “Radiografía Digital de Niños, Niñas y Adolescentes”, que este año aportó reveladores datos respecto del comportamiento que los menores del país tienen al momento de usar diferentes plataformas (dispositivos móviles o PC) para jugar en línea. El comportamiento de los gamers chilenos Elaborada por Criteria y ClaroVTR, este sondeo reveló que un 38% de los menores juega todos los días, en tanto que un 30% reconoce hacerlo casi todos los días. El estudio consigna también que los juegos de construcción de mundos son los preferidos (31%), en especial en el segmento entre los 8 y 12 años (40%). Del mismo modo, el teléfono móvil es el dispositivo más utilizado para jugar en línea (69%) y quienes más usan computadores son los adolescentes (53%). En tanto, los más pequeños son, en proporción, quienes más utilizan las tablets (23%). Los hallazgos son datos valiosos que nos permiten entender cómo y a qué juegan, lo que es fundamental para promover prácticas responsables y seguras en el uso de la tecnología — Cyntia Soto Respecto de esos hallazgos, Cyntia Soto, gerenta de Sostenibilidad de ClaroVTR, apuntó que “los datos aportados por nuestra Radiografía Digital de Niños, Niñas y Adolescentes nos permiten conocer los hábitos de juego online de los menores de edad en Chile”. “Los hallazgos son datos valiosos que nos permiten entender cómo y a qué juegan, lo que es fundamental para promover prácticas responsables y seguras en el uso de la tecnología”, agregó. PUBLICIDAD “Este estudio es un paso importante para comprender el impacto de los videojuegos en la vida de los menores y para desarrollar estrategias efectivas que promuevan su bienestar y seguridad en el mundo digital”, puntualizó. Cabe señalar que este estudio comprendió una muestra de mil menores entre niños, niñas y adolescentes, además de otro millar de padres y madres de las principales ciudades de las zonas norte, centro y sur de Chile.
Los niños pequeños, cuando notan que un ser querido está sintiendo tristeza o necesita ayuda, orgánicamente acuden a sostener, acompañar y calmarlo. En términos simples, están siendo solidarios. Y es que poder cuidar, proteger, confiar y pertenecer, son experiencias fundamentales en el desarrollo humano, así como sentirse cuidado, protegido, querido y parte de un grupo social. La solidaridad viene a resaltar justamente esa capacidad que tenemos para ocupar nuestra sensibilidad, fomentando la consciencia humana y movilizándonos hacia la empatía, la ocupación y la ayuda social. En este sentido, la “ educación socio emocional, es fundamental en el desarrollo integral de los estudiantes de todas las edades, intencionado su aplicación en la práctica y cotidianidad ”, explica Adela Gajardo, psicóloga del equipo de Salvaguarda de la red educacional Cognita, que cuenta con 17 colegios en Chile. “Podemos contribuir con una perspectiva que los ayude a identificar y fortalecer las competencias y habilidades que son esenciales para trabajar el valor de la solidaridad. Estas son la autogestión, la conciencia social, las habilidades sociales y resolución de conflictos, la empatía, la colaboración, el aprecio por la diversidad, la interdependencia y la pertenencia”, complementa la especialista. Modelo y ejemplo Sin embargo, por mucho que se trate de inculcar, el ejemplo es fundamental para la educación de cualquier valor, siendo las personas significativas de su entorno a quienes los niños siguen y que los inspiran a ser solidarios. “ En la familia, son los padres, abuelos y tíos; y en el colegio, sus profesores, principalmente ”, comenta la psicóloga de Cognita. Por eso es tan importante comprender que los adultos son un modelo permanente de la solidaridad, donde pueden además intencionar una actitud activa y propositiva al momento de participar y asistir a quienes lo necesiten. “ Los padres pueden ayudar a desarrollar la conciencia social en los niños, que les permitirá sensibilizar, empatizar y aportar desde su lugar, a quienes no presentan las mismas oportunidades ”, dice Adela Gajardo. Así, es principal que los niños reflexionen, aprecien y valoren las actitudes solidarias observadas en su casa y que tengan conciencia de cómo pueden ellos y ellas ayudar a fortalecerlas y hacerlas crecer. Para ello, la psicóloga propone trabajar con ejemplos y casos tomados de diversos ámbitos de la cotidianeidad como la actualidad, ciencia, artes, deporte, etc. donde ellos reconozcan la presencia o ausencia del valor de la solidaridad o conductas prosociales. Un ejercicio puede ser comentar a los niños que, a raíz de los cortes de luz por el temporal, hubo personas que no fueron afectadas en el suministro de electricidad e invitaron a quienes lo necesitaron para que pudieran cargar sus celulares o facilitaron un cable que les permitiera usar su refrigerador y algunas ampolletas. Asimismo, otra actividad formativa para realizar en familia se da en la película El Rey León, cuenta Adela Gajardo, psicóloga de la red Cognita. “ Cuando Scar enfrenta a Simba; ¿qué podría hacerse para que Scar fuera solidario? ¿Por qué él es así? ¿Podríamos comprenderlo y ayudarlo para que cambiara?” Sin duda una excelente invitación a reflexionar.
La creciente integración de tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial (IA) en juguetes destinados al público infantil ha abierto un nuevo frente de preocupaciones para padres y guardianes en cuanto a la seguridad y la privacidad de los menores. Un estudio reciente realizado por Rapid7, una entidad de ciberseguridad, ha puesto de relieve una inquietante realidad, que debe ser de interés de muchos padres de familia: aproximadamente el 80% de los juguetes equipados con inteligencia artificial presentan vulnerabilidades significativas en términos de ciberseguridad. Además, enfatizó que estos juguetes también podrían ser explotados para fines de vigilancia no autorizada por parte de sujetos extraños. Qué peligros presentan estos juguetes con IA Este análisis, que ha abarcado una variada gama de dispositivos de Internet de las Cosas (IoT), incluidos juguetes con IA, muestra que el 90% de los artículos evaluados contienen al menos una falencia de seguridad crítica. El riesgo inherente a estas vulnerabilidades se traduce en la posibilidad de que actores malintencionados puedan acceder a datos sensibles almacenados en los juguetes, o peor aún, tomar control sobre sus funcionalidades de audio y video. Asimismo, un informe complementario proveniente de Consumer Reports ha venido a confirmar estos hallazgos, señalando que el 78% de los juguetes inteligentes analizados poseen puntos débiles que podrían facilitar la exposición de información personal de los niños. Por eso, es necesario estar atento a cualquier amenaza o comportamiento extraño y reconocer cómo proteger a los menores de estas amenazas cibernéticas. Qué dicen los padres sobre este hecho Intrínsecamente vinculado a estas evaluaciones, una encuesta realizada por NortonLifeLock refleja la creciente preocupación entre los padres. El 45% de los encuestados expresó su inquietud sobre el uso indebido potencial de las cámaras y micrófonos integrados en los juguetes inteligentes, los cuales podrían ser empleados para actividades de vigilancia encubierta. Ante este panorama, expertos en ciberseguridad recalcan la importancia de adoptar medidas preventivas para asegurar el uso seguro de estos juguetes, sin renunciar a sus beneficios en términos educativos y de entretenimiento. Cómo prevenir los riesgos de los juguetes que usan IA Para ello, se han compilado una serie de recomendaciones dirigidas a los padres, con el fin de fortalecer la protección de los menores frente a estos riesgos digitales. Entre las principales medidas sugeridas por expertos se encuentran: La realización de investigaciones previas antes de adquirir cualquier juguete inteligente, prestando especial atención a las reseñas sobre su seguridad y privacidad. Es crucial mantener actualizado el software de estos dispositivos, debido a que los fabricantes suelen lanzar parches y actualizaciones para corregir vulnerabilidades conocidas. La configuración de contraseñas robustas y únicas para cada juguete, que impidan conexiones de redes desconocidas y posibles ciberamenazas. La desactivación de funciones no esenciales, como cámaras y micrófonos cuando no estén en uso. Además, se insta a los padres a educar a sus hijos sobre los principios básicos de la seguridad en línea, fomentando un ambiente de diálogo abierto sobre los riesgos potenciales asociados a la tecnología. Estas estrategias, junto con una vigilancia constante de los padres en cuanto a las interacciones de los menores con sus juguetes inteligentes, podrían significar la diferencia entre asegurar una experiencia enriquecedora y segura y exponer a los niños a riesgos cibernéticos innecesarios. Por esto, en un mundo cada vez más conectado, donde la tecnología avanza a pasos sin precedentes, resulta imperativo que la seguridad digital de los más jóvenes se coloque en el centro de la conversación sobre innovación. Solo así será posible garantizar que la adopción de herramientas inteligentes contribuya positivamente al desarrollo y bienestar de los niños, sin comprometer su seguridad o privacidad.
Según reveló un estudio auspiciado por el Instituto Nacional de Abuso de Drogas en los Estados Unidos, el maltrato infantil no solo afecta de manera psicológica sino que físicamente modifica la estructura cortical del cerebro, aumentando la posibilidad de consumo de drogas y de padecer trastornos mentales en la edad adulta. Publicada por el Centro Nacional de Información Biotecnológica, la investigación de referencia realizó resonancias magnéticas a 265 niños (142 de ellos maltratados y 123 no maltratados), observándose marcadas diferencias en la centralidad de diversas regiones corticales. Martin Teicher y su equipo del McLean Hospital, Harvard Medical School y Northeastern University, asociaron el maltrato en los ahora adultos jóvenes con una menor centralidad en las regiones del cerebro involucradas en la regulación emocional y la capacidad de atribuir con precisión pensamientos o intenciones a los demás. Por el contrario, se encontró mayor centralidad en regiones que tienen que ver con la percepción emocional interna, el pensamiento autorreferencial y la autoconciencia. “ Esto puede proporcionar un mecanismo potencial de cómo el maltrato aumenta el riesgo para la psicopatología ”, establecieron los investigadores. A raíz de estos hallazgos, se determinó que el maltrato infantil es un factor altamente estresante que altera las trayectorias del desarrollo cerebral.
Chile tiene una lamentable realidad en términos de seguridad vial; diariamente fallece un promedio de 4 personas. Y en lo que va del año, ya han muerto más de 480 en siniestros viales, según la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset). Un panorama que nos invita a reflexionar sobre lo indispensable que es educar en seguridad vial desde edades tempranas, si queremos reducir estas cifras. Para Carla Cerda, coordinadora del programa Road Safety, el cual se realiza hace más de 10 años en los colegios Pumahue y Manquecura, de la red Cognita. “ Los niños, niñas y adolescentes deben ser educados para ser peatones y futuros conductores conscientes de su comportamiento y del impacto que éste puede conllevar en las calles y en la seguridad colectiva”. El objetivo central de este programa es reducir, a través de la adquisición de conocimientos y habilidades preventivas, los siniestros viales que involucran a los niños y jóvenes que transitan las calles del país. Para lograrlo, la especialista advierte que no sólo los colegios deben hacer esfuerzos, los padres también tienen que estar plenamente involucrados, educando desde el ejemplo y la construcción de hábitos. En ese sentido, transmitir los valores de la educación vial es esencial. Estos se focalizan en el autocuidado y el cuidado de los otros, ayudando a desarrollar hábitos de convivencia ciudadana, respeto por las normativas de tránsito, cuidado de la vida humana y natural, e impulsando prácticas que benefician a toda la comunidad. Carla Cerda comenta que en la red Cognita, pionera en instaurar este programa en sus colegios desde el jardín infantil, “se aborda la educación vial de manera transversal en todos los ciclos, de acuerdo a la edad, a través de intervenciones y recursos que acercan la temática de manera lúdica y significativa, como cuentos virtuales, cuenta cuentos, cuadernillos de trabajo, obras de teatro, convenios con instituciones que brindan charlas educativas, participación en la Brigada Road Safety, salidas educativas, jornadas prácticas en circuitos viales, entre otras”. Claves para inculcar hábitos La educación vial es una disciplina que busca preparar a las personas, idealmente desde la infancia, a cómo usar las vías públicas en el ejercicio de sus distintos roles sociales: como pasajero, peatón o conductor. La última semana de mayo se celebra la Semana de la Seguridad Vial, una instancia impulsada por la ONU a nivel mundial y que hace tres años lanzó la Década de Acción por la Seguridad Vial 2021-2030, para promover medidas y acciones de prevención de siniestros de tránsito, una sólida cultura vial, además del fortalecimiento de la buena convivencia en los espacios públicos. La especialista de la red Cognita entrega algunas sencillas recomendaciones para inculcar la seguridad vial en los niños: Ejemplo, ejemplo, ejemplo. Los niños hacen y dicen lo que ven y escuchan de sus padres, así que ten una conducta amable, a la defensiva y de precaución. Utiliza el cinturón de seguridad y enfatiza la importancia de su uso en todo momento, ya sea como conductor, copiloto o pasajero en cualquier vehículo. Lo mismo con el sistema de retención infantil. No cruces a media calle. Recuérdales a tus hijos que se debe cruzar sólo en pasos de cebra o semáforos. Y que aún así, se debe mirar y tener precaución antes de cruzar. En las luces rojas, aprovecha de explicarles lo que significan las señales de tránsito que hay en el entorno y por qué es importante recordarlas y respetarlas. No hables por teléfono, mandes mensajes, ni estés preocupado de la radio. Tu hijo debe verte concentrado en la ruta. Enséñales a subir y bajar por la puerta del auto que da hacia la acera, a no sacar la cabeza, los brazos o juguetes por la ventana. Tampoco a jugar con los pestillos o cerraduras del auto.