











Alerta científica: Cometa 3I/ATLAS acelera inesperadamente
El astrofísico Avi Loeb, planteó que la aceleración inusual observada en el cometa 3I/ATLAS no se ajusta a lo esperado para un cometa natural, sugiriendo la posibilidad de que esté siendo impulsado por algún tipo de propulsión propia.
25 de noviembre de 2025
El misterio del cometa interestelar 3I/ATLAS ha vuelto a captar la atención de la comunidad científica luego de que nuevas imágenes tomadas por astrónomos aficionados revelaran un comportamiento desconcertante desde el punto de vista de la física convencional.
El renombrado astrofísico Avi Loeb, una figura destacada en el debate sobre objetos interestelares, planteó que la aceleración inusual observada en el visitante no se ajusta a lo esperado para un cometa natural, sugiriendo en cambio la posibilidad de que esté siendo impulsado por algún tipo de propulsión propia.
Según Loeb, los nuevos cálculos realizados a partir de imágenes capturadas entre el 22 y 24 de noviembre muestran una cola y una anti-cola excepcionalmente largas. Para lograr la aceleración detectada, un cometa convencional habría tenido que desintegrarse a gran escala en un corto período de tiempo, lo cual no concuerda con la forma relativamente intacta en la que se mantiene 3I/ATLAS.
En palabras del científico, "la aceleración medida no se corresponde con la pérdida de masa observada", lo que ha generado controversia en la comunidad científica.
Loeb no afirma categóricamente que se trate de una nave espacial o que haya vida involucrada. Su argumento se centra en la posibilidad de que la aceleración sea resultado de algún sistema de propulsión, incluso uno básico, lo cual explicaría de manera más coherente los datos observados.
Las imágenes tomadas desde Japón, España y Chile muestran una anti-cola extremadamente densa orientada hacia el Sol, con una fuerza aparente capaz de contrarrestar el viento solar. Esta peculiaridad ha llevado a plantear si 3I/ATLAS está expulsando material de manera desconocida o si estamos ante un fenómeno sin precedentes en un objeto proveniente del exterior del Sistema Solar.
El cometa alcanzará su punto más cercano a la Tierra el 19 de diciembre, a una distancia segura pero lo suficientemente próxima como para permitir observaciones más detalladas a través de telescopios como el Hubble y el James Webb.
La incógnita sobre la naturaleza exacta de 3I/ATLAS permanece abierta hasta que lleguen los datos adicionales en diciembre, según Loeb quien afirma que "el veredicto dependerá de los datos que lleguen en diciembre".
Fuente: Publimetro


































