16 de junio de 2025
La seremi (s) de Obras Públicas, Gabriela Carrasco, ha destacado la importancia de una reciente iniciativa que ha significado una mejora significativa para la comunidad. El proyecto, llevado a cabo por la Subdirección de Servicios Sanitarios Rurales de la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) del MOP, ha implicado el reemplazo completo de las redes de distribución de agua.
La entrega oficial tuvo lugar en una ceremonia en la que participaron el delegado presidencial de la Provincia del Loa, Miguel Ballesteros, y la propia seremi (s), Gabriela Carrasco. En este evento, se compartió la noticia con los vecinos, quienes han recibido con satisfacción esta importante mejora.
"Marca el inicio de varias intervenciones que queremos hacer en Lasana en materia de agua potable rural y lo que va a permitir, principalmente, es la continuidad del servicio de agua potable", señaló Carrasco.
El proyecto ha implicado el cambio de siete cámaras y la renovación integral de las tuberías que llevan el agua a los hogares. Por su parte, Miguel Ballesteros destacó que estas obras forman parte de los esfuerzos del Gobierno por reducir la brecha en el acceso a servicios básicos en las comunidades rurales de la Provincia de Loa.
"Esto viene a mejorar, ciertamente, el sistema de agua para los habitantes", afirmó Ballesteros.
Además, se anunció que el MOP, a través de la DOH, llevará a cabo futuras mejoras en el sistema APR para garantizar la protección de la red vial, dada su proximidad a la Ruta B-175. La comunidad de Lasana, cuya economía se basa principalmente en la agricultura y ganadería, ha recibido con gran satisfacción estas mejoras.
Luis Galleguillos, primer director de la comunidad, expresó: "Las nuevas matrices son muy importantes para el Valle de Lasana, para todos los usuarios de agua potable". Por su parte, Marcela Saires, tesorera del Comité de APR de Lasana, también mostró su gratitud por este proyecto que asegura un suministro normal y evita cortes inesperados.
Finalmente, el contrato para estas obras tuvo un costo final de $428 millones y tuvo como objetivo principal la conservación preventiva y correctiva del sistema existente. Las obras incluyeron cambios en redes por sectores, reposición de arranques domiciliarios y pruebas hidrostáticas para garantizar un correcto funcionamiento.