











Conflicto en Christ School por cierre inminente
Estudiantes, apoderados y funcionarios se movilizan pacíficamente ante la falta de respuestas del Ministerio de Educación. La comunidad denuncia incertidumbre, ausencia de reubicaciones y falta de garantías laborales.
25 de noviembre de 2025
Una jornada marcada por la tensión y la preocupación se vivió en el sector Las Compañías, en La Serena, luego de que estudiantes del Colegio Christ School iniciaran una toma pacífica del establecimiento. La acción busca presionar al Ministerio de Educación para obtener respuestas concretas frente a la inminente clausura del colegio, programada para el término del año escolar 2025, proceso que mantiene en alerta a toda la comunidad educativa.
La decisión de los alumnos responde a meses de incertidumbre, gestiones fallidas y un sostenedor que, pese a los intentos por revertir las observaciones que llevaron a la orden de cierre, no ha logrado cambios sustantivos. Ante este escenario, los estudiantes consideran que la movilización es la única vía para hacer visible su preocupación.
Alionka Gutiérrez, presidenta del centro de alumnos, explicó que la medida se articula como una reacción inevitable a un prolongado periodo de problemas. "Esta toma surge de inconvenientes que llevan bastante tiempo en el colegio. Es nuestro momento para pedirle al seremi de Educación la continuidad del establecimiento", señaló. La dirigente añadió que la acción se mantendrá mientras no exista una respuesta que garantice el futuro del plantel. "Si nos vienen a decir lo mismo de siempre, que quedan pocos días para arreglar todo, eso no sirve. Lo que queremos es que el colegio siga funcionando", enfatizó.
La movilización cuenta con el respaldo activo de los apoderados, quienes denuncian la ausencia de un plan real de reubicación para los más de 800 estudiantes que quedarían sin matrícula. Alejandra Carrasco, apoderada desde hace una década, describió la situación como "tensa" y criticó duramente al MINEDUC. "Nos dijeron que habría colegio para todos, pero hasta ahora no tenemos nada. Mis dos hijos están sin cupo. Ya agotamos todas las vías pacíficas y no hay solución", afirmó.
FUNCIONARIOS A LA DERIVA
No obstante, el conflicto también golpea directamente a los trabajadores del establecimiento. Pablo Arcos, presidente del sindicato de funcionarios, señaló a Diario El Día que el personal vive con profunda angustia debido a la falta de respuestas. "Las soluciones del ministerio son para los estudiantes y sus familias. Para nosotros no existe ninguna alternativa de reubicación. Si el colegio cierra, quedamos todos cesantes", advirtió. Por ello, el sindicato trabaja con asesoría legal para asegurar que, de concretarse la clausura, se respeten los procesos y se paguen las indemnizaciones correspondientes.
LAS DEMANDAS
En este contexto, los estudiantes entregaron un petitorio formal a las autoridades, compuesto por cinco puntos centrales. Entre ellos, destaca la continuidad del funcionamiento del colegio ante el fracaso de los intentos de reubicación; el reconocimiento oficial a la Corporación Educacional D.P.C., que permitiría avanzar en un contrato de arriendo bajo la excepcionalidad del artículo 14 del decreto 40 de 2016 y la solicitud de un plazo "real y prudente" para regularizar las observaciones de la Dirección de Obras Municipales. También exigen garantías de que ningún participante de la toma pacífica sea sancionado o perseguido.
Al respecto, los alumnos anunciaron que mantendrán la movilización por un mínimo de tres días o hasta que sus demandas "sean tomadas en consideración y cuenten con una respuesta clara y verídica". Aseguran que están dispuestos a deponer la toma apenas exista una solución concreta, pues su principal objetivo es asegurar la continuidad educativa para 2026 o, al menos, prorrogar el funcionamiento del establecimiento por un año más en caso de que no existan cupos para toda la matrícula.
Fuente: DiarioElDia Región



































