El Síndrome de Autofermentación (ABS por sus siglas en inglés) es un trastorno, como explica la web Best Doctors Insurance, que produce alcohol etílico a través de la fermentación de azúcares y carbohidratos ingeridos en su propio sistema digestivo. Esta condición genera síntomas de intoxicación alcohólica sin que la persona haya bebido ninguna gota. Se calcula que sólo lo padecen unas 20 personas en todo el mundo.

Descubierto en la década de 1970, el ABS ha sido objeto de fascinación y estudio dentro de la comunidad médica. La fermentación interna es provocada por levaduras o bacterias que crecen descontroladamente en el intestino, transformando los carbohidratos en alcohol. Los casos documentados han puesto en evidencia la complejidad de diagnosticar y tratar esta afección, pues los síntomas pueden ser erróneamente atribuidos al consumo de alcohol.

Síntomas de esta afección

Los síntomas varían en intensidad y duración entre los individuos. Algunos pueden tener manifestaciones leves y otros episodios totalmente incapacitantes. Pueden ser los siguientes:​

• Intoxicación: Exhibir síntomas de ebriedad, como problemas de coordinación, dificultad para hablar y alteración del estado mental.
  
• Problemas digestivos: Problemas gastrointestinales, como hinchazón, diarrea o malestar abdominal.
  
• Alteración del estado de ánimo: Cambios anímicos, irritabilidad y confusión.
  
• Niveles fluctuantes del alcohol: La imprevisibilidad de las variaciones del etanol hace casi imposible predecir cuándo se manifestarán los síntomas.
  

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