No es casual que las personas más persuasivas y seguras de sí mismas sepan también cómo vestirse. Detrás de esa elección aparentemente banal se esconde la colorimetría, una disciplina que estudia cómo los colores influyen en la percepción y las emociones. Nuestra mente responde al color de manera inmediata, incluso antes de procesar la forma o el contenido. Por eso, un tono elegido con acierto puede modificar por completo el impacto interpersonal. La colorimetría estudia la percepción física del color y nos da una guía para tomar decisiones que generen armonía y credibilidad. En otras palabras, la inteligencia también puede expresarse a través del color de tu ropa. Azul, negro y blanco: la tríada de la mente lúcida Entre todas las gamas posibles, hay tres colores que se repiten en quienes proyectan equilibrio y seguridad. El primero es el azul, asociado al cielo y al mar, y, por tanto, a la estabilidad y la confianza. Transmite calma, autoridad y fiabilidad, aunque también cierta distancia emocional. No es casual que sea el color preferido para entornos laborales o entrevistas importantes: inspira competencia y serenidad. El negro, por su parte, representa poder, elegancia y sofisticación. Pero su uso constante puede transmitir frialdad o tristeza. Cuando se lleva con estilo puede resultar magnético, pero si se abusa de él, puede generar desconfianza. En el punto medio está su fuerza: en una prenda bien combinada o en un acento dentro del conjunto. El blanco, en cambio, evoca pureza y claridad. Es el color del orden y de la apertura mental, aunque también del perfeccionismo. Es un color que transmite equilibrio. La verdadera elección inteligente Pero aunque estos tres colores sean los más habituales entre personas con alto coeficiente intelectual, la clave no está tanto en imitarlos como en saber qué tonos encajan con nosotros mismos. Lo realmente inteligente quizá no es vestirse de azul, negro o blanco sin más, sino hacerlo con autoconocimiento. En la forma de combinar y llevar los colores se revela mucho más que el gusto: se revela la mente.
La NASA ha convocado a un comité de observación para estudiar el comportamiento, composición química y trayectoria del cometa interestelar 3I/ATLAS, que podría ser más antiguo que el propio Sol. Este cuerpo celeste es uno de los pocos objetos de su tipo detectados en la historia y varias agencias espaciales esperan poder estudiarlo en detalle mientras se desplaza rápidamente al interior de nuestro Sistema Solar. Según reporta La Nación de Costa Rica, el cometa 3I/ATLAS viaja a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, el doble de la velocidad a la que se mueve la Tierra en su órbita. Esta velocidad se ve potenciada por su acercamiento al Sol y por su origen más allá del Sistema Solar. A diferencia de los asteroides, los cometas están compuestos de hielo y polvo, lo que provoca que al acercarse al sol se calienten y comiencen a liberar gases formando sus características colas que pueden extenderse por millones de kilómetros. Siendo un objeto interestelar, es decir, formado en otro sistema planetario, el análisis químico del 3I/ATLAS podría revelar materiales anteriores a la formación del Sistema Solar y generar nuevas teorías sobre la evolución de otros sistemas estelares. Los datos recopilados por astrónomos indican que el mayor punto de acercamiento del 3I/ATLAS con la Tierra ocurrirá el próximo 19 de diciembre, cuando pase a una distancia de 1,8 unidades astronómicas, equivalente a unos 270 millones de kilómetros. Aunque no será visible a simple vista, podrá observarse con telescopios medianos y grandes ubicados en regiones con cielos despejados, como en el norte de Chile. A pesar de estar bajo monitoreo de la Red Internacional para la Alerta de Asteroides de la NASA, no se ha emitido ninguna advertencia de impacto por parte del cometa. Solo se ha organizado una campaña de observación científica para estudiar este fenómeno astronómico único. Fuente: Meganoticias
Daniela Quiñones Cortés, bióloga ambiental, magíster en educación y candidata a doctora en Ciencias Aplicadas, ha sido seleccionada por la prestigiosa revista Nature como una de las cinco mujeres finalistas globales en los «Nature Awards for Inspiring Women in Science 2025», en la categoría Science Outreach, convirtiéndola en la primera chilena en alcanzar esta distinción internacional. Cabe recordar que en 2019 Chile ya se había hecho presente en la categoría «Innovating Science Shortlist» c on el proyecto Cazadoras de Estrellas, coordinado por una de las fundadoras, Victoria Pérez. La categoría Science Outreach de los premios Nature honra precisamente a quienes «inspiran a una nueva generación de científicas alrededor del mundo» al acercar la ciencia a la ciudadanía de manera accesible y transformadora. Con una trayectoria comprometida con la educación y la ciencia, Quiñones viajará hasta Londres el próximo 15 de octubre para representar al país en una inédita ceremonia que reunirá a líderes mundiales en ciencia, industria y educación. «Estar entre las cinco mujeres más inspiradoras del mundo según Nature no es solo un honor personal. Es también una manera de decirle a todas las niñas y jóvenes de América Latina que sí se puede, que el conocimiento transforma vidas, y que la ciencia necesita de nuestras voces, nuestras historias y nuestros territorios», señala la bióloga. De la investigación a la divulgación científica La nominación de Daniela Quiñones destaca su compromiso con la investigación de frontera y el liderazgo en educación científica con enfoque de género. Su trabajo en el desarrollo de biofertilizantes a partir de residuos agrícolas y forestales ha demostrado su dedicación en el ámbito científico. «Me gustaría compartirles que sea cual sea la profesión que elijan, siempre se van a encontrar obstáculos y dificultades, pero cuando uno hace las cosas con cariño, eso se transforma en oportunidades de poder transformar el mundo. El mensaje para las niñas y futuras científicas es a elegir con el corazón y que tenga sentido lo que sea que quieran hacer a futuro, eso las llevará lejos», expresa Quiñones. Como líder de contenidos en Fundación Ingeniosas, Daniela ha sido una fuerza impulsora detrás de bootcamps, talleres y comunidades científicas para niñas, adolescentes y mujeres en Chile, Argentina, Colombia y Perú. Estas iniciativas han logrado impactar a miles de estudiantes en contextos vulnerables, derribando barreras y despertando vocaciones científicas en una nueva generación. Su trayectoria demuestra que la nueva generación de científicas latinoamericanas no solo investigan, sino que también comunican, educan y transforman. Este reconocimiento en los Nature Awards for Inspiring Women in Science marca un hito significativo para Chile y para las mujeres que están redefiniendo su rol en la ciencia.
En Estados Unidos, se están realizando los primeros ensayos clínicos con rapamicina, una innovadora píldora que podría revolucionar la forma en que cuidamos la salud de nuestros fieles compañeros caninos. Esta sustancia promete extender la esperanza de vida de los perros, abriendo nuevas posibilidades para garantizar su bienestar a lo largo de los años. Hasta ahora hay dos grandes estudios donde cientos de perros están probando un tratamiento para vivir más, uno comercial llamado STAY, el cual ha mantenido en secretismo su píldora por ahora, ya que está siendo desarrollado con fines comerciales; y otro llamado TRIAD, con fines académicos y sin ánimo de lucro. TRIAD pertenece al Dog Aging Project y está administrando rapamicina a 850 perros. Estudios previos en ratones mostraron efectividad y se espera que los perros puedan aumentar un 30% su esperanza de vida. El ensayo durará 3 años. La rapamicina es un medicamento inmunosupresor, es decir, que disminuye la respuesta inmune del cuerpo, cuando el organismo se defiende contra sustancias o microorganismos que reconoce como extraños o posiblemente dañinos. De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer, la rapamicina “se usa para impedir que el cuerpo rechace los trasplantes de órganos o médula ósea”, y también puede “bloquear una proteína que participa en la división celular”. Su nombre hace referencia a Rapa Nui, ya que fue aislada de la bacteria Streptomyces hygroscopicus, que se encontró en los suelos de la Isla de Pascua. Lo que hace que los científicos estén probando la rapamicina para retrasar el envejecimiento es que esta puede inhibir a la proteína mTOR, una proteína que tiene una importante función a nivel celular. Inhibirla “ lleva a una disminución de la inflamación crónica, lo que llamamos inflamación estéril, propia de la edad avanzada “, explicó a elDiario.es Matt Kaeberlein, investigador de la Universidad de Washington y el científico tras Dog Aging Project. Lee también... ¿Una píldora para alargar la vida de los perros? Kaeberlein estaba investigando los beneficios de la rapamicina en ratones cuando se dio cuenta de que podía intentar usarla para retrasar el envejecimiento. “Me dije: ¡Guau! Tenemos la oportunidad de retrasar el envejecimiento de las mascotas, de darles más años de vida de calidad”, comentó. Según el investigador, “la rapamicina influye en múltiples procesos que tienen un papel en la biología del envejecimiento”, pero el más destacable es la inhibición de la proteína mTOR. “A medida que envejecemos, parece que hay una especie de desregulación persistente de mTOR y eso provoca inflamación crónica. (…)Una forma simple de entenderlo es que la rapamicina restablece el equilibrio entre el crecimiento, la reproducción y la resistencia al estrés”, explicó. Los perros son los sujetos de estudio porque envejecen de una manera similar a los humanos —aunque no igual— y también, al ser domesticados, comparten hábitos parecidos. Para el ensayo se escogieron perros de al menos 7 años, que pesen entre 18 y 50 kilos. Deben ser perros grandes, porque envejecen más rápido que los de razas pequeñas. Los pacientes de TRIAD recibirán rapamicina durante un año, y algunos recibirán placebo, luego habrá un seguimiento de dos años. Kaeberlein dice que algunos animales se han sometido al tratamiento durante un año sin efectos adversos y con efectos positivos. “Ya hemos observado mejoras en la función ventricular izquierda. El ventrículo izquierdo es una de las cámaras del corazón cuya función disminuye con la edad. Y esa mejora la vemos en los perros que recibieron rapamicina, no en los que recibieron placebo”, planteó. Kaeberlein puntualizó que aun no sabe cuánto es lo que conseguirá alargar la vida de los caninos. “Si nos fijamos en lo que se ha demostrado en ratones, el mayor efecto de la rapamicina es un aumento de alrededor de un 30% de vida media”, expresó. “Si lo comparamos en términos de años de vida en humanos, un cambio del 15% en una esperanza de vida de 80 años equivale a 12 años. Un cambio del 30% en la esperanza de vida equivale a 24 años. Así que eso sería lo que se produciría en las personas si el efecto porcentual se mantuviera igual: entre 12 y 24 años. Pero aún no sabemos si funcionará”, añadió. Pese a su potencial uso para retrasar el envejecimiento, Kaeberlein manifestó que hay que esperar a los resultados de los ensayos, pero de todas formas, ayudarán a conocer más sobre qué utilidades puede tener la rapamicina. “Estamos ante una nueva frontera”, dijo el investigador. Si bien se conoce que tiene efectos positivos en animales, expertos han advertido que esto no garantiza que también los tenga en humanos. Además, su efecto inmunosupresor sería un obstáculo, ya que dejaría al organismo expuesto a enfermedades autoinmunes. “Estamos empezando a comprender la biología del envejecimiento lo suficiente como para desarrollar los primeros medicamentos que lo retrasan, y eso implica que habrá un período en el que tendremos que ajustar nuestra forma de pensar y abordar la salud. Y estoy seguro de que habrá algunas experiencias interesantes en el camino”, planteó.
Pensado para los estudiantes de II y III Medio de todo Chile, la Facultad de Matemáticas de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Escuela de Ingeniería Estadística de la Universidad del Bío-bio, anunciaron las inscripciones para la 5ta Olimpiada de Big Data, el encuentro escolar más grande de ciencia de datos en el país. Se trata de un certamen escolar creado en 2018 y que ha recibido postulaciones de más de 150 colegios y 800 estudiantes de distintas regiones del país, convirtiéndose en una instancia gratuita y clave para la formación temprana en análisis de datos. «Hoy, los datos están en el centro de las decisiones que toman empresas, gobiernos y organizaciones: permiten anticipar tendencias, resolver problemas complejos y generar soluciones innovadoras en áreas tan diversas como la salud, la educación, el medioambiente y la tecnología. Participar en esta Olimpiada no solo les dará herramientas para comprender mejor el mundo que los rodea, sino también para proyectarse como protagonistas del futuro «, explicó la académica UC y organizadora del evento, María José García. ¿Cómo participar? Los estudiantes interesados deberán inscribirse en el formulario hasta el 28 de septiembre, en grupos de cuatro integrantes que estarán representados por el profesor responsable. Una fecha clave será el 29 de septiembre, cuando los equipos reciban el desafío de preselección que medirá sus habilidades y que deberán enviar hasta el 3 de noviembre. Una vez anunciados los finalistas, podrán ser parte de un entrenamiento intensivo en técnicas modernas de análisis y visualización de datos. La fase final se llevará a cabo entre el 5 y 9 de enero del 2026, en el Campus San Joaquín de la UC y concluirá con una ceremonia de premiación el 13 de enero.
No es casual que las personas más persuasivas y seguras de sí mismas sepan también cómo vestirse. Detrás de esa elección aparentemente banal se esconde la colorimetría, una disciplina que estudia cómo los colores influyen en la percepción y las emociones. Nuestra mente responde al color de manera inmediata, incluso antes de procesar la forma o el contenido. Por eso, un tono elegido con acierto puede modificar por completo el impacto interpersonal. La colorimetría estudia la percepción física del color y nos da una guía para tomar decisiones que generen armonía y credibilidad. En otras palabras, la inteligencia también puede expresarse a través del color de tu ropa. Azul, negro y blanco: la tríada de la mente lúcida Entre todas las gamas posibles, hay tres colores que se repiten en quienes proyectan equilibrio y seguridad. El primero es el azul, asociado al cielo y al mar, y, por tanto, a la estabilidad y la confianza. Transmite calma, autoridad y fiabilidad, aunque también cierta distancia emocional. No es casual que sea el color preferido para entornos laborales o entrevistas importantes: inspira competencia y serenidad. El negro, por su parte, representa poder, elegancia y sofisticación. Pero su uso constante puede transmitir frialdad o tristeza. Cuando se lleva con estilo puede resultar magnético, pero si se abusa de él, puede generar desconfianza. En el punto medio está su fuerza: en una prenda bien combinada o en un acento dentro del conjunto. El blanco, en cambio, evoca pureza y claridad. Es el color del orden y de la apertura mental, aunque también del perfeccionismo. Es un color que transmite equilibrio. La verdadera elección inteligente Pero aunque estos tres colores sean los más habituales entre personas con alto coeficiente intelectual, la clave no está tanto en imitarlos como en saber qué tonos encajan con nosotros mismos. Lo realmente inteligente quizá no es vestirse de azul, negro o blanco sin más, sino hacerlo con autoconocimiento. En la forma de combinar y llevar los colores se revela mucho más que el gusto: se revela la mente.
La NASA ha convocado a un comité de observación para estudiar el comportamiento, composición química y trayectoria del cometa interestelar 3I/ATLAS, que podría ser más antiguo que el propio Sol. Este cuerpo celeste es uno de los pocos objetos de su tipo detectados en la historia y varias agencias espaciales esperan poder estudiarlo en detalle mientras se desplaza rápidamente al interior de nuestro Sistema Solar. Según reporta La Nación de Costa Rica, el cometa 3I/ATLAS viaja a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, el doble de la velocidad a la que se mueve la Tierra en su órbita. Esta velocidad se ve potenciada por su acercamiento al Sol y por su origen más allá del Sistema Solar. A diferencia de los asteroides, los cometas están compuestos de hielo y polvo, lo que provoca que al acercarse al sol se calienten y comiencen a liberar gases formando sus características colas que pueden extenderse por millones de kilómetros. Siendo un objeto interestelar, es decir, formado en otro sistema planetario, el análisis químico del 3I/ATLAS podría revelar materiales anteriores a la formación del Sistema Solar y generar nuevas teorías sobre la evolución de otros sistemas estelares. Los datos recopilados por astrónomos indican que el mayor punto de acercamiento del 3I/ATLAS con la Tierra ocurrirá el próximo 19 de diciembre, cuando pase a una distancia de 1,8 unidades astronómicas, equivalente a unos 270 millones de kilómetros. Aunque no será visible a simple vista, podrá observarse con telescopios medianos y grandes ubicados en regiones con cielos despejados, como en el norte de Chile. A pesar de estar bajo monitoreo de la Red Internacional para la Alerta de Asteroides de la NASA, no se ha emitido ninguna advertencia de impacto por parte del cometa. Solo se ha organizado una campaña de observación científica para estudiar este fenómeno astronómico único. Fuente: Meganoticias
Daniela Quiñones Cortés, bióloga ambiental, magíster en educación y candidata a doctora en Ciencias Aplicadas, ha sido seleccionada por la prestigiosa revista Nature como una de las cinco mujeres finalistas globales en los «Nature Awards for Inspiring Women in Science 2025», en la categoría Science Outreach, convirtiéndola en la primera chilena en alcanzar esta distinción internacional. Cabe recordar que en 2019 Chile ya se había hecho presente en la categoría «Innovating Science Shortlist» c on el proyecto Cazadoras de Estrellas, coordinado por una de las fundadoras, Victoria Pérez. La categoría Science Outreach de los premios Nature honra precisamente a quienes «inspiran a una nueva generación de científicas alrededor del mundo» al acercar la ciencia a la ciudadanía de manera accesible y transformadora. Con una trayectoria comprometida con la educación y la ciencia, Quiñones viajará hasta Londres el próximo 15 de octubre para representar al país en una inédita ceremonia que reunirá a líderes mundiales en ciencia, industria y educación. «Estar entre las cinco mujeres más inspiradoras del mundo según Nature no es solo un honor personal. Es también una manera de decirle a todas las niñas y jóvenes de América Latina que sí se puede, que el conocimiento transforma vidas, y que la ciencia necesita de nuestras voces, nuestras historias y nuestros territorios», señala la bióloga. De la investigación a la divulgación científica La nominación de Daniela Quiñones destaca su compromiso con la investigación de frontera y el liderazgo en educación científica con enfoque de género. Su trabajo en el desarrollo de biofertilizantes a partir de residuos agrícolas y forestales ha demostrado su dedicación en el ámbito científico. «Me gustaría compartirles que sea cual sea la profesión que elijan, siempre se van a encontrar obstáculos y dificultades, pero cuando uno hace las cosas con cariño, eso se transforma en oportunidades de poder transformar el mundo. El mensaje para las niñas y futuras científicas es a elegir con el corazón y que tenga sentido lo que sea que quieran hacer a futuro, eso las llevará lejos», expresa Quiñones. Como líder de contenidos en Fundación Ingeniosas, Daniela ha sido una fuerza impulsora detrás de bootcamps, talleres y comunidades científicas para niñas, adolescentes y mujeres en Chile, Argentina, Colombia y Perú. Estas iniciativas han logrado impactar a miles de estudiantes en contextos vulnerables, derribando barreras y despertando vocaciones científicas en una nueva generación. Su trayectoria demuestra que la nueva generación de científicas latinoamericanas no solo investigan, sino que también comunican, educan y transforman. Este reconocimiento en los Nature Awards for Inspiring Women in Science marca un hito significativo para Chile y para las mujeres que están redefiniendo su rol en la ciencia.
En Estados Unidos, se están realizando los primeros ensayos clínicos con rapamicina, una innovadora píldora que podría revolucionar la forma en que cuidamos la salud de nuestros fieles compañeros caninos. Esta sustancia promete extender la esperanza de vida de los perros, abriendo nuevas posibilidades para garantizar su bienestar a lo largo de los años. Hasta ahora hay dos grandes estudios donde cientos de perros están probando un tratamiento para vivir más, uno comercial llamado STAY, el cual ha mantenido en secretismo su píldora por ahora, ya que está siendo desarrollado con fines comerciales; y otro llamado TRIAD, con fines académicos y sin ánimo de lucro. TRIAD pertenece al Dog Aging Project y está administrando rapamicina a 850 perros. Estudios previos en ratones mostraron efectividad y se espera que los perros puedan aumentar un 30% su esperanza de vida. El ensayo durará 3 años. La rapamicina es un medicamento inmunosupresor, es decir, que disminuye la respuesta inmune del cuerpo, cuando el organismo se defiende contra sustancias o microorganismos que reconoce como extraños o posiblemente dañinos. De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer, la rapamicina “se usa para impedir que el cuerpo rechace los trasplantes de órganos o médula ósea”, y también puede “bloquear una proteína que participa en la división celular”. Su nombre hace referencia a Rapa Nui, ya que fue aislada de la bacteria Streptomyces hygroscopicus, que se encontró en los suelos de la Isla de Pascua. Lo que hace que los científicos estén probando la rapamicina para retrasar el envejecimiento es que esta puede inhibir a la proteína mTOR, una proteína que tiene una importante función a nivel celular. Inhibirla “ lleva a una disminución de la inflamación crónica, lo que llamamos inflamación estéril, propia de la edad avanzada “, explicó a elDiario.es Matt Kaeberlein, investigador de la Universidad de Washington y el científico tras Dog Aging Project. Lee también... ¿Una píldora para alargar la vida de los perros? Kaeberlein estaba investigando los beneficios de la rapamicina en ratones cuando se dio cuenta de que podía intentar usarla para retrasar el envejecimiento. “Me dije: ¡Guau! Tenemos la oportunidad de retrasar el envejecimiento de las mascotas, de darles más años de vida de calidad”, comentó. Según el investigador, “la rapamicina influye en múltiples procesos que tienen un papel en la biología del envejecimiento”, pero el más destacable es la inhibición de la proteína mTOR. “A medida que envejecemos, parece que hay una especie de desregulación persistente de mTOR y eso provoca inflamación crónica. (…)Una forma simple de entenderlo es que la rapamicina restablece el equilibrio entre el crecimiento, la reproducción y la resistencia al estrés”, explicó. Los perros son los sujetos de estudio porque envejecen de una manera similar a los humanos —aunque no igual— y también, al ser domesticados, comparten hábitos parecidos. Para el ensayo se escogieron perros de al menos 7 años, que pesen entre 18 y 50 kilos. Deben ser perros grandes, porque envejecen más rápido que los de razas pequeñas. Los pacientes de TRIAD recibirán rapamicina durante un año, y algunos recibirán placebo, luego habrá un seguimiento de dos años. Kaeberlein dice que algunos animales se han sometido al tratamiento durante un año sin efectos adversos y con efectos positivos. “Ya hemos observado mejoras en la función ventricular izquierda. El ventrículo izquierdo es una de las cámaras del corazón cuya función disminuye con la edad. Y esa mejora la vemos en los perros que recibieron rapamicina, no en los que recibieron placebo”, planteó. Kaeberlein puntualizó que aun no sabe cuánto es lo que conseguirá alargar la vida de los caninos. “Si nos fijamos en lo que se ha demostrado en ratones, el mayor efecto de la rapamicina es un aumento de alrededor de un 30% de vida media”, expresó. “Si lo comparamos en términos de años de vida en humanos, un cambio del 15% en una esperanza de vida de 80 años equivale a 12 años. Un cambio del 30% en la esperanza de vida equivale a 24 años. Así que eso sería lo que se produciría en las personas si el efecto porcentual se mantuviera igual: entre 12 y 24 años. Pero aún no sabemos si funcionará”, añadió. Pese a su potencial uso para retrasar el envejecimiento, Kaeberlein manifestó que hay que esperar a los resultados de los ensayos, pero de todas formas, ayudarán a conocer más sobre qué utilidades puede tener la rapamicina. “Estamos ante una nueva frontera”, dijo el investigador. Si bien se conoce que tiene efectos positivos en animales, expertos han advertido que esto no garantiza que también los tenga en humanos. Además, su efecto inmunosupresor sería un obstáculo, ya que dejaría al organismo expuesto a enfermedades autoinmunes. “Estamos empezando a comprender la biología del envejecimiento lo suficiente como para desarrollar los primeros medicamentos que lo retrasan, y eso implica que habrá un período en el que tendremos que ajustar nuestra forma de pensar y abordar la salud. Y estoy seguro de que habrá algunas experiencias interesantes en el camino”, planteó.
Pensado para los estudiantes de II y III Medio de todo Chile, la Facultad de Matemáticas de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Escuela de Ingeniería Estadística de la Universidad del Bío-bio, anunciaron las inscripciones para la 5ta Olimpiada de Big Data, el encuentro escolar más grande de ciencia de datos en el país. Se trata de un certamen escolar creado en 2018 y que ha recibido postulaciones de más de 150 colegios y 800 estudiantes de distintas regiones del país, convirtiéndose en una instancia gratuita y clave para la formación temprana en análisis de datos. «Hoy, los datos están en el centro de las decisiones que toman empresas, gobiernos y organizaciones: permiten anticipar tendencias, resolver problemas complejos y generar soluciones innovadoras en áreas tan diversas como la salud, la educación, el medioambiente y la tecnología. Participar en esta Olimpiada no solo les dará herramientas para comprender mejor el mundo que los rodea, sino también para proyectarse como protagonistas del futuro «, explicó la académica UC y organizadora del evento, María José García. ¿Cómo participar? Los estudiantes interesados deberán inscribirse en el formulario hasta el 28 de septiembre, en grupos de cuatro integrantes que estarán representados por el profesor responsable. Una fecha clave será el 29 de septiembre, cuando los equipos reciban el desafío de preselección que medirá sus habilidades y que deberán enviar hasta el 3 de noviembre. Una vez anunciados los finalistas, podrán ser parte de un entrenamiento intensivo en técnicas modernas de análisis y visualización de datos. La fase final se llevará a cabo entre el 5 y 9 de enero del 2026, en el Campus San Joaquín de la UC y concluirá con una ceremonia de premiación el 13 de enero.